Sánchez no convoca a la Ejecutiva del PSOE e impone el discurso a favor de los indultos
El PSOE no ha convocado, como cada lunes, la Ejecutiva del partido para fijar un criterio respecto a los indultos. Sánchez fija el argumentario a los suyos para neutralizar la voz de los críticos.
Pedro Sánchez impone el relato a los suyos en defensa de los indultos a los presos del procés. El Partido Socialista no ha convocado, como cada lunes, la Ejecutiva del partido para fijar un criterio respecto a este asunto. Tampoco se convocó la reunión de la permanente hace dos semanas.
Esta vez y desde Ferraz ponen la excusa de la XIII cumbre hispano-polaca donde Sánchez se ha reunido con el primer ministro de este país. Pero lo cierto es que sí hubiera dado tiempo a que la Ejecutiva se celebrase, apuntan voces críticas a ED.
Estas reuniones con el núcleo duro del presidente «suelen convocarse vía telématica y a primera hora de la mañana», sostienen. Sánchez sí que estará presente en la reunión, a primera hora de la tarde, del comité de seguimiento del coronavirus, según figura en su agenda enviada por Moncloa a los periodistas.
«La opinión del partido es la que marca la ejecutiva presidida por el secretario general. Lo demás son opiniones, respetables, pero particulares», dijo el pasado viernes la vicepresidenta primera, Carmen Calvo.
Los dirigentes más críticos con aplicar la medida de gracia a los presos independentistas esquivan en público las preguntas señalando que esta decisión «es exclusiva del Gobierno». Ya es la segunda semana que Ferraz no convoca a su órgano de gestión del partido y un miembro consultado por ED ya advierte que «esto también puede pasarnos factura».
Sin embargo, ya existe argumentario en la formación respecto a los indultos. Ministros, barones, diputados e, incluso, alcaldes destacados por su seguidismo a Sánchez han salido durante el fin de semana y este lunes a dar la cara en favor de los indultos y respaldando el discurso elaborado por el equipo del presidente.
Objetivo: neutralizar la opinión de los barones
Según ha podido saber Economía Digital, Sánchez ya no mencionará palabras negativas como «venganza» y «revancha» que utilizó en su primer día en Bruselas cuando defendió los indultos y que causó un verdadero enfado en el ámbito judicial.
Ahora, además de la «concordia», el presidente y los suyos destacarán que «se trata de un acto de valentía» y harán ver que no necesitan el apoyo de los independentistas: ‘escurrirán el bulto’ señalando que «ya tenemos los Presupuestos aprobados».
Curiosamente estos dirigentes niegan que existan voces críticas en el partido, algunos como el castellanomanchego Emiliano García-Page o el extremeño Guillermo Fernández Vara, ya se han pronunciado en contra. Sin embargo y por ahora, tanto el objetivo de Moncloa como el de Ferraz es neutralizar la opinión de los barones críticos a base de aparecer en los medios en defensa del indulto.
Así lo han aplicado este fin de semana dos ministros, Miquel Iceta (Política Territorial) y José Luis Ábalos (Transportes) con sendas entrevistas en distintos medios. El que fuera líder del PSC fue el primero en defender esta figura cuando era candidato a la Presidencia de la Generalitat por el PSC en las elecciones de diciembre 2017.
«Respetamos la opinión del Supremo, pero no tenemos por qué compartirla. Si el Gobierno decide indultar, no está enmendando la plana al tribunal. Es una consideración política, de interés general, no jurídica», señaló Iceta; mientras Ábalos sugirió que «este Gobierno está dispuesto a asumir el coste de los indultos».
La operación está decidida y quieren hacerla rápido. De ahí que los socialistas más afines al presidente hayan tomado las riendas de los medios y del partido para hacer pedagogía tanto interna como externa a un ritmo trepidante. Así y como cara visible de los alcaldes señalan a Óscar Puente. El vallisoletano considera «oportuno» y «necesario» el indulto.
La cara del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso, Adriana Lastra, ya ha destacado que «España necesita sanar heridas. Necesita estabilidad, confianza y diálogo. Y ese es el compromiso del Gobierno y el Partido Socialista Obrero Español».
Y por parte de Ferraz, la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, ya ha defendido que «para alcanzar sueños que parecen imposibles se requiere determinación, capacidad de asumir riesgos y voluntad de entendimiento. Nuestro empeño es una Cataluña libre de fracturas: plena confianza y apoyo a Sánchez . El PSOE ha ganado ya otras batallas, mantengamos la unidad».
El Gobierno ya trabaja para hacer posible la medida y solucionar así y según estas voces el »conflicto catalán’. No existe ningún atisbo de que quiera el secretario general del PSOE quiera tratar este asunto con su partido.
Ni siquiera en el próximo Comité Federal, tal y como han propuestos algunos presidentes territoriales en voz baja y también algunos dirigentes críticos con esta medida. «Por ahora no hay ninguna petición registrada», defienden desde Ferraz para incluir este punto en el orden del día del próximo cónclave que, presumiblemente, está anunciado para julio.
El Gobierno quiere darse prisa y no vincula al partido para que las urnas no pasen factura a los socialistas. Está por ver si Sánchez y los suyos acallan el malestar interno de aquí a julio.