Sánchez remite a Bruselas los detalles técnicos para el tope del gas con retraso y exige rapidez
El presidente pide rapidez en la respuesta ya que las expectativas del Gobierno se centraban en que el límite estuviera vigente desde finales del mes de abril
Pedro Sánchez ha anunciado que España y Portugal ya han remitido el borrador con los últimos detalles sobre el mecanismo para topar el precio del gas a la Comisión Europea, un requisito que la institución había establecido después de aceptar el límite del precio en 50 euros megavatio/hora. Así, España envía los detalles técnicos para comenzar a negociar con Bruselas con semanas de retraso, sin embargo, ha exigido rapidez en la respuesta puesto que las expectativas del Gobierno se centraban en que el límite estuviera vigente desde finales del mes de abril.
«Esperamos que sea la propuesta definitiva y que se pueda poner en marcha en los próximos días», ha destacado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su discurso en la ‘XXXVII Reunió Cercle d’Economia’, a la cual ha asistido la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von Der Leyen.
Por su parte, la portavoz comunitaria de Competencia, Arianna Podesta, ha confirmado en declaraciones a EFE la recepción de la propuesta y ha asegurado que la Comisión Europea (CE) la estudiará «con urgencia» mientras continúan los «contactos técnicos» entre Bruselas, Madrid y Lisboa.
En este sentido, ha destacado que la institución europea mantiene su «compromiso» de evaluar de forma urgente «si las medidas temporales de emergencia en el mercado de la electricidad propuestas por España y Portugal se ajustan tanto a las normas sobre ayudas estatales de la UE como a la ley del mercado interior de la energía, en el marco del acuerdo político en principio alcanzado en el pasado semanas».
Semanas de retraso
Los estados miembro de la Unión Europea dieron el visto bueno a la «excepción ibérica» en el Consejo Europeo del 25 de marzo, después de meses de presión encabezada por España para intervenir el mercado eléctrico y abaratar la factura de la luz. Pero, España y Portugal debían trabajar la propuesta a nivel técnico y enviar los detalles a la Comisión, que tenía que validar el mecanismo para limitar el precio al que se refleja el gas en el mercado eléctrico peninsular.
La vicepresidenta española Teresa Ribera y el ministro portugués de Medioambiente y Acción Climática, José Duarte Cordeiro, se reunieron el 26 de abril en Bruselas con la vicepresidenta comunitaria responsable del área de Competencia, Margrethe Vestager. El encuentro fructificó en un «acuerdo político» para aplicar la excepción ibérica durante al menos un año.
El objetivo era que la Comisión validara el sistema para que pudiera llegar al Consejo de Ministros del 3 de mayo en España, día en que el Gobierno de Pedro Sánchez iba a explicar de forma pública cómo se ejecutarían los detalles técnicos de la ‘excepción ibérica‘ e iba a proceder a su aplicación inmediata.
Sin embargo, Ribera cambió el plazo para llevar al Consejo de Ministros el resultado final de la medida y lo fijó en el 10 de mayo, para después dejar también esta fecha en el aire, puesto que según explicó, aún estaban perfilando los detalles técnicos junto a Portugal.
Finalmente, los dos países han enviado a Bruselas su propuesta final más tarde de lo previsto y Ribera dijo este lunes que creía que la aprobación se retrasaría «una semana».
Pérdida de ahorro de 30 millones de euros a la semana
El retraso en la aplicación de los topes del gas, y haciendo cálculos sobre el consumo energético de la gran industria que se aglutina bajo el paraguas de Aege (74 plantas industriales repartidas por toda España, con un consumo de electricidad que supuso en 2021 el 9,5% de la demanda anual eléctrica peninsular), está comportando una pérdida de ahorro de cerca de los 30 millones de euros a la semana.
El conjunto de empresas que representa una de las principales organizaciones industriales tuvo un consumo de 20,5 TWh en 2021, lo que supone un gasto de más de 430.000 MWh al mes. Teniendo en cuenta un ahorro de 70 por MWh -que será lo que provoque como poco la ‘excepción ibérica’-, el resultado final por cada semana estaría en esa horquilla de los 30 M€.