Sánchez enfada a la patronal tras encargar a la banca un plan para decidir qué empresas se salvan
El Gobierno no ha llamado a la patronal, ni a CEOE ni a Cepyme, y tampoco a los autónomos (ATA) para gestionar las próximas ayudas a los empresarios.
Los empresarios recibirán finalmente ayudas directas del Gobierno para paliar las fuertes pérdidas ocasionadas por la pandemia del coronavirus. Sin embargo, el Ejecutivo todavía no ha contactado con la patronal ni con los autónomos para estudiar qué empresas recibirán esas ayudas y con qué condiciones.
Ni CEOE, ni Cepyme, ni ATA han recibido ninguna llamada para reunirse con el Gobierno, según las fuentes consultadas por Economía Digital. Quien sí ha recibido este llamamiento han sido los bancos.
De hecho, Moncloa ha creado un grupo de trabajo en el que figuran el Instituto de Crédito Oficial (ICO), el Banco de España, la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y la Asociación Española de Banca (AEB) para analizar la solvencia de cada una, comprobar si son ‘empresas-zombi’ (sólo sobreviven por las ayudas del Estado) y cuáles se podrían salvar si se les inyecta liquidez.
La patronal cree que el Gobierno debería de llamarles porque son una «pieza fundamental» y no consideran que la banca sea la única que juzgue qué empresas se salvan y a cuáles se las deja morir. «Está claro que las ayudas no van a llegar a todos, pero tenemos derecho a tener voz», señalan las fuentes consultadas.
Fuentes gubernamentales confirman que la «banca tendrá un papel importante», aunque siguen sin confirmar si serán ayudas directas o transferencias a fondo perdido, por ejemplo.
Economía Digital publicó la semana pasada que la ministra de Economía, Nadia Calviño, está estudiando condonar una parte de los préstamos ICO a las empresas, mientras Podemos exige ayudas directas para evitar una ola de insolvencias. El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez (Podemos), considera que «el apoyo fiscal a personas y empresas en respuesta a la pandemia se sitúa en torno al 6-8% del PIB en la UE. España, con un 5% del PIB, tiene margen para ir más allá, impulsando nuevas ayudas a pymes y autónomos».
El Gobierno culpa a la UE
La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, culpó este martes a la Comisión Europea por el retraso en aprobar estas ayudas para los empresarios. Según Montero, las ayudas podrían tardar «varias semanas» y el retraso proviene de la Comisión Europea. Su activación dependerá de «la no afectación a la competencia entre Estados miembros», recalcó.
Unas declaraciones que desde la patronal califican como «verdad, a medias» porque varios países europeos como Alemania y Francia ya presentaron estos trámites hace tiempo ante la Comisión para facilitar rápidamente los fondos a sus empresas. «España lo ha hecho tarde», destacan y ahora la Comisión lo tendrá que estudiar y aprobarlo, como todo trámite, insisten.
La vicepresidenta económica, Nadia Calviño, ya avanzó en una entrevista su solicitud a Bruselas para «adaptar el marco legal para que todas las administraciones públicas puedan dar más ayudas directas a cada una de esas empresas». Por el momento, sólo cinco comunidades autónomas han facilitado ayudas directas a las empresas, en este caso para salvar el turismo y son: Cataluña, País Vasco, Murcia, Baleares y La Rioja.
La mayoría de territorios han anunciado su intención, pero hace falta la autorización del Gobierno central para ampliar las ayudas recibidas. Fuentes gubernamentales cuantifican en más de 39.000 millones los fondos facilitados a las CCAA entre 2020 y 2021, permitirán a autonomías y ayuntamientos «compensar una parte de los costes fijos de las empresas».
La hostelería dice «basta»
Precisamente, la hostelería dijo esta semana «basta ya». Los representantes de las principales patronales advierten al Gobierno de que «si se produce un daño hay que indemnizarlo» y, por ello, se han manifestado estos días en todas las provincias para solicitar ayudas directas para sus negocios.
Los representantes de las principales asociaciones del sector hostelero, Hostelería de España, Hostelería de Madrid y la Asociación Madrileña de empresas de restauración (AMER), rompieron este martes varios platos contra el suelo delante del Ministerio de Hacienda en un acto simbólico para decir «basta» a la falta de ayudas directas del Gobierno. «Basta de ser los paganos de los platos rotos de la crisis del coronavirus», destacó el presidente de Hostelería de España, José Luis Yzuel.
Las cifras recopiladas por la patronal son escalofriantes, desde el inicio de la crisis han cerrado 85.000 establecimientos ante una caída de la facturación media del 50% respecto al año 2019, lo que supone 70.000 millones menos de ingresos.
Por ello y ante la inacción del Gobierno, las principales asociaciones de hosteleros se han organizado para presentar distintas demandas a nivel estatal, declaraciones por el Estado de Alarma decretado el año pasado, y ante las 17 comunidades autónomas. «Las empresas no aguantan hasta que nos vacunemos todos. De ahí la urgencia», zanja Yzuel.