Sánchez defiende una interconexión energética con Italia si Francia la rechaza
En la reunión del próximo martes entre Sánchez y el canciller alemán, Olaf Scholz, tratarán sobre la interconexión energética
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado que la intención del Ejecutivo es hacer una interconexión pirenaica energética entre la Península Ibérica y Francia, pero que, “si no sale adelante el plan A, habrá que buscar el plan B”, que consiste en una interconexión energética “entre España e Italia”.
Sánchez ha recordado que en el plan de energía de la Comisión Europea, en el cual se fijan las infraestructuras y las inversiones energéticas “prioritarias” para Europa, está incluida la puesta en marcha de una interconexión pirenaica entra la Península Ibérica y Francia. Por lo que, si no es posible avanzar en ese proyecto «por las dificultades que haya en política doméstica en Francia», existe otra opción prevista por la Comisión en su programa: «Una alternativa que pasa por una interconexión entre España e Italia», ha señalado el presidente.
Reunión con Scholz
Sánchez, que ha realizado estas declaraciones en Bogotá tras la reunión con el nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha lamentado que actualmente estemos «en un 3% de interconexión entre la Península Ibérica y el mercado energético europeo«. Algo que ha llevado a España a ser “una isla energética” y también a lograr ese acuerdo “importante” para defender a las familias españolas “ante el alza de los precios del gas” con el tope al precio del gas, es decir, la llamada ‘excepción ibérica’.
El presidente del Gobierno quiere que la interconexión, sea por Francia o por Italia, se financie «con dinero europeo”, y ha asegurado que «la Comisión está dispuesta» a ello, a la vez que ha agradecido el interés del canciller alemán, Olaf Scholz, para impulsar ese proyecto pese a los recelos de Francia.
Este asunto estará presente en el viaje a Alemania que proyecta Sánchez para el próximo martes, cuyo formato aún no se ha definido oficialmente y que, a falta de confirmación oficial, permitiría al jefe del Gobierno y al canciller alemán verse en el castillo de Meseberg, a unos 70 kilómetros de la capital alemana.
Sánchez ha asegurado que la interconexión “sería buena” para hacer frente “al chantaje energético de Putin”, al tiempo que ha recordado que en España se localiza el 30% de la capacidad de regasificación de todo el conjunto de la Unión Europea. “Imagínese la capacidad que tenemos de ofrecer alternativas a la dependencia del gas ruso a economías tan importantes como la alemana”, ha defendido.