Sánchez anuncia una reforma del mercado eléctrico aunque protesten «los bancos, Botín y Galán»

Pedro Sánchez termina el curso político con nuevos anuncios y más intervenciones en el mercado energético. Antes de irse de vacaciones, el presidente del Gobierno ha comunicado un paquete de medidas urgentes que aprobará el próximo lunes en el Consejo de Ministros para «doblegar la inflación» en un momento en el que el IPC ya roza el 11%. La primera propuesta es una reforma del mercado eléctrico con la intención de desacoplar la evolución precio del gas al precio de la electricidad que será presentada en septiembre ante la Comisión Europea. La segunda se basa en poner un tope al precio de las emisiones de Co2.

El jefe del Ejecutivo ha explicado que se trata de un plan en el que ha trabajado durante semanas la vicepresidenta Teresa Ribera, que se le ha comunicado al conjunto de administraciones públicas y para el que se ha contado con el resto de grupos parlamentarios y el sector privado. El objetivo principal es reducir el consumo de gas en un 7% para evitar la falta de suministro.

Y para ello la responsabilidad recaerá en los hogares y en las empresas. «El ahorro de energía es una tarea de todos. Tenemos que reducir nuestra factura energética y contribuir entre todos a reducir nuestra dependencia energética de Putin«, ha insistido el presidente. «Hemos hecho mucho, pero hay que ir mas allá», ha agregado.

«El ahorro de energía es una tarea de todos»

Pedro Sánchez

El presidente ha intentado predicar con el ejemplo y, por ello, ha explicado que comparecerá, a partir de ahora, sin corbata para evitar subir el aire acondicionado. También ha dado orden a sus ministros y a los altos cargos de la Administración para que hagan lo mismo y ha animado al sector privado a que reduzca el uso del aire acondicionado en los centros de trabajo. «Solo hay que pasearse por los centros comerciales para comprobar que el aire acondicionado está demasiado bajo», ha criticado el líder socialista.

En su discurso, en el que a priori iba a hacer balance del año, también ha informado de que España ha recibido este viernes el segundo pago de los fondos europeos para el Plan de Recuperación, por valor de 12.000 millones de euros. Por otro lado, ha explicado que en el próximo Consejo de Ministros también se llevará un decreto de medidas urgentes en materia de incendios forestales. «Queremos fortalecer la coordinación y las capacidades de todas las administraciones en las tareas de prevención y extinción de incendios, así como la restauración de las zonas afectadas», ha afirmado.

Sánchez, sobre bancos y eléctricas: «Pueden y deben ayudar a España»

En su intervención no podía faltar una referencia al impuesto que el Gobierno ha aprobado para la banca y las empresas energéticas. Sánchez ha asegurado que ambos sectores «pueden y deben ayudar al país» a salir de la actual situación de crisis económica, igual que España hizo con los bancos en la crisis financiera, en la misma línea que se pronunció este jueves el portavoz socialista Patxi López, que recordó que el Estado ayudó a la banca con 60.000 millones.

Sánchez ha dejado claro que «arrimar el hombro no es un eslógan, es una obligación para las empresas que se están beneficiando de esta situación» con sus dividendos. «Las grandes empresas energéticas y financieras pueden y deben ayudar al país a salir de esta situación igual que España ayudó a los bancos. Lo mismo que hacen otros gobiernos europeos que son de signo incluso conservador», ha concluido.

«He escuchado a algunos dirigentes de bancos, a la señora Botín (Banco Santander), al señor Galán (Iberdrola)«, ha advertido Sánchez. «Si protestan, es que vamos en la buena dirección. Y si se fijan, hasta incluso son los mismos que protestaron y que dijeron que subiendo el SMI y con la reforma laboral se iba a caer España, se iba a crear desempleo, que íbamos a expulsar muchos trabajadores del mercado laboral. Ha sucedido todo lo contrario. Vamos en la buena dirección», ha zanjado.

Foco para las «clases medias y trabajadoras»

El presidente socialista no ha querido dejar lugar a dudas: con el cambio de timón que realizó durante el Debate sobre el estado de la Nación, donde viró hacia unas medidas de carácter mucho más social y progresista, su foco está puesto en «las clases medias y trabajadoras». «Este Gobierno antepondrá siempre el beneficio social a los privilegios de algunos».

El objetivo está claro, para Sánchez. «Lograr que España avance, a diferencia de la parálisis en la que se sumió a España en los gobiernos precedentes«, ha presumido, porque, a sus ojos,  «vivimos tiempos en lo que lo urgente y lo importante se superpone».

«Nada ni nadie nos va a detener en nuestra voluntad de proteger a la clase media. Le pese a quien le pese«, ha insistido, tras subrayar sus dos grandes bazas económicas, a la vista de los últimos datos publicados: primero, el empleo (20,5 millones de ocupados, con récord de indefinidos); después, el crecimiento (1,1% en el segundo trimestre, que dejará el PIB en torno al 4%). También se ha referido, pero de refilón y pasando de puntillas, a las sombras de su fotografía macroeconómica: la inflación y la situación fiscal.

Presumir de la excepción ibérica

El líder del Ejecutivo ha sacado pecho con la movilización de fondos por parte del Estado para combatir la inflación y el alza de precios. Él mismo ha calificado esos 30.000 millones de euros en ayudas de un «descomunal esfuerzo», porque es «el doble de lo hecho hasta el momento por economías como Alemania».

«También hemos logrado avances beneficiosos para los ciudadanos y nuestras empresas, como la excepción ibérica«, ha subrayado. Sánchez ha insistido en que se trata de una medida «que ya está reduciendo y va a reducir aún más la factura de aquellos hogares en el mercado regulado y estimamos que sea entre un 15% y un 20%«.

No ha perdido la oportunidad de arremeter contra el PP, porque, para Sánchez, en esta lucha contra la inflación, los acuerdos han llegado «sin el apoyo de la oposición conservadora». Se ha referido a la extensión a todo el año la vigencia de la bonificación de los carburantes, a la limitación de la subida del alquiler, al IMV, a la rebaja del IVA en la electricidad. Pero lo cierto es que el PP se abstuvo y gracias a ello salieron adelante en el Congreso.

Sin sorpresas en septiembre

Pedro Sánchez ya ha dado varias sorpresas con cambios en el Gobierno. Aún tiene tiempo en el año que le queda para terminar la legislatura, pero en su intervención en el Palacio de la Moncloa ha descartado esta opción ya que está «satisfecho» con su equipo y su trabajo.

Del mismo modo, ha rechazado la posibilidad de que se celebren las elecciones más allá de diciembre de 2023 «porque es un mandato constitucional» y este Gobierno, a diferencia de otros, «cumple con la Constitución».