Sánchez actúa contra la «resistencia» antimascarillas en Madrid

El Delegado del Gobierno avisa de sanciones por el incumplimiento del uso de la mascarilla y el ministro de Justicia critica la "irresponsabilidad"

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El Ejecutivo de Pedro Sánchez se lanzará con fuerza contra la rebeldía antimascarillas que se concentró este domingo en Madrid haciendo caso omiso de las medidas sanitarias contra el coronavirus. La manifestación fue convocada en las redes sociales por, entre otros, el cantante Miguel Bosé, y contaba con el permiso de la delegación del Gobierno en la Comunidad, que recordó a los organizadores la obligación de llevar tapabocas y de mantener las distancias.

Para sorpresa de nadie —la concentración tenía entre sus objetivos protestar contra la supuesta «farsa» de la pandemia y vincular el lamentable tren de noticias de 2020 a la puesta en marcha de una suerte de «nuevo orden mundial»—, no ha trascendido una única imagen de la manifestación que demuestre el uso generalizado de la mascarilla o el respeto a la distancia de al menos 1,5 metros recomendada por el Ministerio de Sanidad y todas las autonomías.

Así las cosas, el delegado del Gobierno, José Manuel Franco —responsable de conceder el permiso para la celebración de manifestaciones—, ya ha avisado que se investigarán los hechos y que «se sancionará con la máxima dureza que nos permita la ley». El hilo de Sánchez en Madrid ha reprochado, en una entrevista este lunes con la Cadena SER, que «siempre hay algún descerebrado, en este caso bastantes, por desgracia, que incumple las normas».

Según Franco, el escrito que presentó un grupo de ciudadanos para comunicar la convocatoria de la manifestación de este domingo en la madrileña plaza de Colón no incluía ninguna alusión a «la oposición a la mascarilla«. «Hablan de instrumentalización, de censura de prensa, de la instrumentalización de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, pero en ningún momento se dice nada en contra de la mascarilla», ha afirmado el delegado del Gobierno en Madrid.

En ese escrito, los organizadores de la manifestación se comprometieron a garantizar la distancia física entre los asistentes y poner carteles para insistir en ello, una práctica que —a la luz de las imágenes que han circulado— fracasó rotundamente. Por ello, en principio no había «ningún motivo para prohibir dicha concentración», pero el evidente incumplimiento de las normas lleva a Franco a avisar que habrá denuncias por «desobediencia o incumplimiento».

Ya este mismo domingo se anunció una investigación sobre los hechos. «Es absolutamente inaceptable lo que allí sucedió, es gravísimo, y como me parece muy grave vamos a actuar en consecuencia, siempre, por supuesto, con respeto a la ley», ha apostillado Franco, que además ha señalado que se extremarán al máximo las precauciones ante la posibilidad de que se convoquen nuevas concentraciones de este tipo.

Campo: «Es un acto de irresponsabilidad flagrante»

El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha calificado de «un acto de irresponsabilidad flagrante» la manifestación antimascarilla de este domingo en Madrid. Campo ha recordado que el derecho de manifestación es un derecho fundamental, pero ha señalado que el marco legal para luchar contra la pandemia tiene que ser perfeccionado para evitar que se repitan situaciones como esta.

Unas 2.500 personas participaron en la manifestación de este domingo en Colón, según la Policía Nacional.

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