Rubalcaba lanza un proyecto federal como salida a la crisis
El PSOE considera que ha llegado, de la mano del PSC, a un “punto de encuentro” para toda España
Las negociaciones han sido duras y largas en los últimos meses, pero Alfredo Pérez Rubalcaba quería enderezar la situación. Es de los pocos dirigentes españoles que es consciente de que toda España tiene un problema si Catalunya no está cómoda en un proyecto conjunto. Y, aunque empujado por el PSC, Rubalcaba ha tomado la iniciativa.
El PSOE ha acabado aprobando un documento con el que pretende reformar la Constitución en clave netamente federal. Se trata de un intento, serio, de buscar una salida a la crisis en todos los ámbitos que vive España, primero la económica y luego la política, aunque, según todos los expertos ésta última puede que sea la más importante: sin buenas instituciones políticas no podrá haber recuperación económica sostenible en el tiempo.
Alternativa a CiU y ERC
Para el PSC el acuerdo es vital, porque su líder, Pere Navarro, necesita presentar una alternativa al soberanismo de CiU y ERC. Rubalcaba ha hecho mención a ello este sábado, al asegurar que, tanto el PSOE como el PSC, “podrán ofrecer un mismo proyecto político, y, por tanto, también todos los socialistas en España”.
Esa consideración es clave, en un momento en el que el PP ya ha iniciado sus críticas y reproches. Este mismo sábado ha sido el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, quien ha reclamado al PSOE que se interese por otras cuestiones, que éste no es el momento. Sin embargo, en un momento en el que todas las instituciones están tocadas y muy erosionadas, el proyecto federal del PSOE “lo acabará asumiendo el PP”, según Rubalcaba, quien ha añadido que no tiene ninguna duda sobre ello.
Salida para la España más dinámica
El PSC no ha conseguido todo lo que quería. El pleno reconocimiento plurinacional de España no se refleja en el documento, ni tampoco se apuesta por consultas territorializadas, como defendía inicialmente el PSC. Pero el documento del PSOE propone un modelo federal que interesa, especialmente, a la España más dinámica, la del arco mediterráneo, porque defiende el principio de ordinalidad, o lo que es lo mismo, con todos los matices que sean necesarios: que las comunidades que más aportan al conjunto no se vean tan castigadas como ahora, porque, en muchas ocasiones las que más reciben acaban teniendo más recursos públicos por habitante que las que ofrecen.
Ello es interesante para Catalunya, para la Comunitat Valencia, para Baleares, pero también para Murcia, Aragón, o Madrid.
La apuesta del PSOE andaluz
El hecho es que la federación más importante del PSOE, la de Andalucía, que dirige José Antonio Griñán, también está en esa línea. No en vano, la Fundación Alfonso Perales, ligada al PSOE andaluz, elaboró un documento de reforma constitucional que plantea un modelo muy similar al que defiende la Fundació Rafael Campalans, lidada al PSC.
La propuesta federal del PSOE, que es un documento político sujeto a negociación, a partir de ahora, con el resto de actores políticos españoles, recoge una reforma del Senado, en profundidad, para que sea la cámara territorial; señala las competencias en la Constitución que deben ser propias de la administración central, para evitar duplicidades como pasa ahora y apuesta por una clara descentralización de la administración de justicia.
Se trata, según Rubalcaba, “de una propuesta de un nuevo pacto para convivir”.
Lluvia de críticas al PSC
¿Problemas? Muchos. Rubalcaba ya ha comprobado este mismo sábado que el PP no quiere ni oír hablar de momento de ello.
Y en Catalunya, al PSC le han llovido ya, en pocas horas desde la aprobación en Granada del documento, todo tipo de críticas.
Para Esquerra, es “perder el tiempo”, mientras que para CiU es una reforma de la Constitución “peor” que la de 1978, según el portavoz parlamentario de la federación nacionalista, Jordi Turull, porque no reconoce el derecho a decidir.
Turull ha ido más allá, al jugar con los sectores críticos del PSC, y ha señalado que Navarro no representa “al conjunto” de los socialistas catalanes.
Y es que en el campo de la izquierda, donde se debería sentir cómodo el PSC, también recibe serias críticas. Para el eurodiputado de ICV, Raül Romeva, los intentos de los socialistas catalanes de que el PSOE les haga caso “son incomprensibles”.