Rosa Díez y Albert Rivera rompen de forma abrupta
UPyD y Ciutadans no logran un acuerdo para establecer una coalición electoral que les permita presentarse en toda España
¿Es una cuestión de egos, o se trata de una imposible relación política? Las formaciones de UPyD y de Ciutadans, que lideran Rosa Díez y Albert Rivera, han roto las negociaciones para establecer una coalición electoral. La reunión de este jueves en Madrid debía marcar un punto de inflexión hacia un acuerdo, pero ha acabado en una ruptura abierta.
Los reproches han sido mutuos, pero el hecho es que UPyD ha recelado desde el inicio de una formación que se constituyó en Barcelona, para combatir el nacionalismo catalán, y actuar en el escenario político catalán, pero que poco a poco fue abriendo el compás con una propuesta de regeneración política para toda España.
UPyD se ve como una fuerza “nacional”, y se ha encontrado con otra que, desde la periferia, ha logrado apoyos en el conjunto del Estado.
Una tercera vía deseada
Rivera ha asegurado, tras la reunión, que la formación de Rosa Díez, reprocha a Ciutadans, precisamente, esa ambición nacional. “Si UPyD teme a un acuerdo global y ambicioso, nosotros, lejos de temer, creemos que sumar es mejor que restar”, ha asegurado, tras añadir que está convencido de que “la inmensa mayoría de los españoles que están a favor de esta tercera vía quería esa coalición”.
UPyD deseaba integrarse en la candidatura de Ciutadans de cara a las inminentes elecciones en Cataluña. Pero Ciutadans aspira a un acuerdo para las municipales y autonómicas en toda España. “Sería muy oportunista un acuerdo ahora para Cataluña, dejando el resto para más adelante”, aseguran fuentes del partido de Albert Rivera.
El precedente de Sosa Wagner
La ruptura se veía venir, porque Rosa Díez ya censuró a Albert Rivera que anunciara un acuerdo para una coalición electoral desde Barcelona, tras una reunión de la ejecutiva del partido. De hecho, UPyD acabó depurando al ya ex eurodiputado Francisco Sosa Wagner, por pedir ese acuerdo con Ciutadans.
La realidad es que Ciutadans tiene ya el 70% de sus militantes fuera de Cataluña. Y cree que podría tener representación en el parlamento autonómico de Madrid, y en otras comunidades autónomas. Albert Rivera ha decidido jugar fuerte la carta “nacional”, al margen de lo que decida UpyD.
Financiación autonómica
Una de las cuestiones en las que se ha producido un choque ha sido, según fuentes de Ciutadans, la propuesta de realizar primarias para elegir a los candidatos. Ciutadans entiende que ningún partido puede renunciar ahora a ello, con un clima social muy encrespado por los casos de corrupción, ante el freno de mano de la formación magenta.
Otra de las cuestiones de fondo en las que también existe una importante distancia es sobre el modelo de financiación de las comunidades. Albert Rivera, que recelaba de esas propuestas cuando fue elegido por primera vez diputado en el Parlament, ve ahora que Cataluña debería tener un modelo de financiación mejor, más estable y que ofreciera mayores recursos. Rosa Díez se niega a ello.
Aunque el propio Rivera ha asegurado que “nunca hay nada definitivo”, Ciutadans apuesta ya por un proyecto propio y probar suerte más allá de Cataluña.