14F: El PSC gana por 50.000 votos, pero ERC, Junts y CUP amplían su mayoría
Las elecciones catalanas en plena pandemia hacen caer la participación notablemente en comparación con los récords registrados en 2017
Las elecciones catalanas con la participación más baja de la historia (el 53%) se han saldado con un empate entre el PSC y ERC, que logran 33 escaños cada uno en el Parlament. Pero el independentismo ha superado el 50% de los votos y la suma entre ERC, JxCat y la CUP da los mismos escaños que entre ERC, el PSC y comunes: 74.
ERC ha superado esta vez a JxCat, que se queda detrás con 32 parlamentarios. La gran sorpresa de la noche ha sido la fuerte irrupción de Vox en la Cámara catalana. La lista de Ignacio Garriga se ha convertido en la cuarta más votada y la formación debutará en el Parlament con 11 representantes, más que cualquier otro partido de la derecha.
La CUP más que duplica sus parlamentarios y llega a los 9 escaños, mientras que En Comú-Podem queda igual, con ocho. Ciudadanos es el gran perdedor de la jornada, pasando de los 36 escaños cuando ganó las elecciones de 2017 a apenas 6 este 14-F; es decir, se deja 30 escaños en poco más de tres años.
El Parlament que se formará tras estos comicios tendrá ocho partidos. El octavo será el PP, que ha perdido un parlamentario y ha quedado ahora con apenas 3.
La participación cae al 53%
Casi dos millones de catalanes menos han votado este 14-F en comparación con 2017. La participación ha sido del 53,4%; casi 2,7 millones de votos, frente a los poco menos de 4,4 millones de hace tres años.
La alta abstención ha hecho que las listas más votadas no hayan superado en ningún caso el millón de sufragios. El PSC apenas ha superado los 606.000 votos que logró en 2017, pese a que técnicamente ha ganado estas elecciones y ha casi duplicado su representación en el Parlament.
Los socialistas, cuyo cabeza de lista es Salvador Illa, dijeron durante la campaña que si eran la lista más votada se presentarían a la investidura. Este domingo se han ratificado en esta previsión. Pero los posibles acuerdos al margen del independentismo se prevén complicados, como mínimo.
ERC, como vaticinaban las encuestas, será la fuerza decisiva. Si los de Pere Aragonès cierran un acuerdo con el PSC (partido al que vetaron en la recta final de la campaña, al igual que los demás independentistas) podrían formar un Govern de izquierdas con los comuns, pero las posibilidades no son altas.
En cambio, desde JxCat reciben con enorme alegría los resultados, pese a haber quedado por debajo de ERC. Los partidos socios del Govern saliente llevan más de un año divorciados, pero los postconvergentes entienden que con unos resultados como estos están obligados a entenderse.
Noticia en desarrollo.