¿Refugiados bienvenidos? Personal sanitario se rebela contra la atención universal en Madrid
El colectivo de inmigrantes se queja de que personal administrativo en los centros de salud se niega a acatar las instrucciones de Carmena y Cifuentes de facilitar la atención sanitaria básica a los sin papeles
La consigna amable del Ayuntamiento de Madrid «Refugees Welcome» que cuelga en el Palacio de Cibeles parece que no es asumida por la totalidad de los funcionarios municipales. Cuando Yosbet Carrera, un inmigrante venezolano que está tramitando un visado como refugiado político, acudió a su nuevo centro de salud, en el barrio de San Bernardo, obtuvo una chocante respuesta por parte de la trabajadora que atendía al público.
Carrera (27 años) lleva casi un año en España. Dispone de un NIE rojo, es decir, un documento provisional que acredita que está tramitando su condición de refugiado político. El joven inmigrante disponía de médico de cabecera asignado en su anterior barrio (Orcasitas) y simplemente acudió al centro de salud a pedir una reasignación de su médico de cabecera, ya que había cambiado de residencia.
«No podemos asignarte un médico de cabecera», respondió una de las encargadas de atender al público. Carrera insistió en que disponía de NIE y también le recordó la campaña desplegada por el Ayuntamiento de Madrid «Madrid sí te cuida» que ha promovido el nuevo gobierno municipal para garantizar que todos los inmigrantes con o sin papeles tengan una atención sanitaria permanente.
La campaña incómoda
«Aunque no tengas papeles, en tu centro de salud te asignarán, médico, enfermera y pediatra», explica la campaña del Ayuntamiento de Madrid. Al mencionar la nueva directriz, la responsable del centro de salud lanzó a Carrera una respuesta inesperada. «Es que yo no estoy de acuerdo con eso».
El refugiado acudió entonces a La Ruana, una asociación sin fines de lucro que ayuda al colectivo inmigrante a su integración en España. La organización ofreció ayuda a Carrera. El caso no es aislado. A la asociación se han acercado otros inmigrantes con el mismo problema.
«La próxima semana acudiré con un trabajador social de esa ONG. Espero resolver el problema. Si no acceden a asignarme mi médico de cabecera, tal como lo tenía antes, tomaré acciones y lo primero que haré es presentar una hoja de reclamación», explica el afectado que quiere concluir el trámite de forma sosegada, sin mayores conflictos administrativos.
Barreras de todo tipo
Carrera recibió tratamiento de transeúnte, a pesar de contar con un documento que le permite una residencia legal temporal. También se le pidieron los datos de familiares o personas que conviven con él para enviarles factura en el caso de que alguno de los tratamientos médicos suponga un coste. «Me negué a dar esa información», explicó.
Otra inmigrante, B.F., acudió a un centro de salud de Leganés para una consulta médica. Allí también se topó con trabas, pero algo diferentes. «Me dijeron que sólo atendían emergencias y que a mí no me podían atender con cita previa», explica.
El Ayuntamiento ha animado a todos los inmigrantes a que se inscriban en los centros de salud y que exijan su derecho a la atención sin ningún tipo de barreras. El delegado del Área de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, ha reconocido que el derecho aún no se disfruta en todos los centros de salud, tal como le han advertido asociaciones y ONG que trabajan con colectivos de inmigrantes y refugiados.
Los responsables municipales consideran, no obstante, que la mayoría de los centros no están poniendo ningún tipo de impedimentos al servicio médico de los inmigrantes. La actitud contraria es la excepción.