Rajoy no cede y relega a Mas en el Foro del Mediterráneo
CiU, PSC y ERC reclaman un gesto para que el president pueda intervenir en el foro econĂłmico
El Gobierno español defiende sus competencias, y más en las circunstancias actuales, en la que domina una desconfianza institucional enorme entre el Ejecutivo de Mariano Rajoy y el Gobierno catalán de Artur Mas. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha comunicado al conseller de Presidència, Francesc Homs, que el President Mas no podrá pronunciar un breve discurso en la apertura del Foro Económico del Mediterráneo Occidental que se celebra este miércoles en Barcelona.
En el foro estarán presentes los ministros de Exteriores de cinco países europeos y de la ribera sur del Mediterráneo, lo que se conoce como foro de Diálogo 5 5. El argumento es que se trata de una cuestión que atañe a la organización del foro internacional. Pero, en cualquier caso, el Gobierno español ha comenzado a lanzar un mensaje desde hace unas semanas: representa a todos los españoles, y también a todos los catalanes, directamente, sin intermediarios en la figura de presidentes autonómicos.
Los tiempos de Jordi Pujol
Sin embargo, en el pasado la situación fue diferente. El líder de Unió, y secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, recordó este lunes que en 1995, en la cumbre euromediterránea, con jefes de estado y de gobierno, el presidente de la Generalitat, en aquel caso, Jordi Pujol, “tuvo la oportunidad de realizar una actuación muy destacada”. Pero eran otros tiempos.
Tanto la cúpula de CiU, como el PSC y ERC han reclamado al Gobierno español que se permita a Artur Mas protagonizar una breve presentación, porque, en juego, está la propia figura del presidente de la Generalitat. Ese ese el argumento que utilizan los partidos catalanes.
El precedente de Foment
Pero el Gobierno español juega sus cartas, en una situación de claro bloqueo institucional debido al proceso soberanista. Duran Lleida lo ha calificado de “veto”, que llega justo después de que Artur Mas decidiera no asistir a un acto de Foment porque no se había respetado, a su juicio, el protocolo según el cual el presidente de la Generalitat cierra los actos institucionales cuando no está el presidente del Gobierno.
Sí estuvo la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que figuraba en calidad de presidenta en funciones.