Puigdemont reactiva la presión contra ERC
Elsa Artadi vuelve a llamar a ERC a sumar fuerzas en una lista conjunta por Barcelona, pero se hace de rogar sobre su salto a la política municipal
El expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, activará este sábado la Crida Nacional per la República sin haber cerrado aún un acuerdo con el Pdecat ni sobre el encaje entre el partido posconvergente y su nuevo movimiento político ni tampoco la lista conjunta que ambas organizaciones negocian desde hace meses entre ellas y también con Junts per Catalunya (JpC).
Pero eso no le ha impedido aprovechar para reactivar el pressing a ERC, no solo con maniobras que han vuelto a tensar la relación entre los socios del gobierno de Quim Torra, sino volviendo a insistir a los de Oriol Junqueras en la posibilidad de ir de la mano a las municipales de Barcelona.
La respuesta está cantada, porque hace muchos meses que Esquerra no quiere saber nada de esas listas únicas en las que no deja de insistir el puigdemontismo, pero eso no impide la insistencia. Este miércoles fue la consellera portavoz de la Generalitat, Elsa Artadi, mujer de confianza de Puigdemont y una de las impulsoras de la Crida, la que explicitó la petición, poco después de que el exconseller Quim Forn confirmara que será el alcaldable de la lista que negocian Pdecat, JpC y la Crida.
Artadi: «Poneos de acuerdo»
Artadi participaba en una presentación de la Crida en Barcelona, el último de esos actos territoriales antes del congreso fundacional que se celebra este sábado también en la capital catalana, y aprovechó para hacer un nuevo llamamiento a esa unidad estratégica que se ha convertido en mantra del independentismo y a la que más se apela a medida que va quedando más lejos.
La consellera de Presidencia remarcó la importancia que tiene estar en las instituciones y advirtió que «para eso lo que hace falta es cooperar y dejar de competir de cara a las contiendas electorales, antes de lanzar un mensaje directo a Forn y al alcaldable de Esquerra, Ernest Maragall que en realidad tenía como principal destinatario al segundo: «Ernest y Quim, poneos de acuerdo, hay que ganar Barcelona, es fundamental», dijo, para luego rematar: «No tiene ningún sentido que podamos gobernar juntos [como ERC y JpC hacen en la Generalitat] y no podamos ir juntos a las listas electorales, es inexplicable».
La apelación -de hecho, de eso se trata, de aprovechar el golpe de efecto- tuvo lugar horas después de que Maragall celebrara el paso adelante del exconseller y se significara a favor de una «unidad del independentismo» de la que dijo que empezó a hablar con Forn el lunes, cuando le visitó en la prisión de Lledoners. Pero Maragall dejó claro que está pensando en alianzas postelectorales, en ningún caso en una lista unitaria por la que en Esquerra no aboga nadie, al menos que se sepa.
Sin acuerdo para la lista de JpC, la Crida y el Pdecat
La ironía es que mientras lanza esos llamamientos, Artadi siga sin desvelar si finalmente dejará el gobierno catalán para dar el salto a la política municipal. La consellera es la apuesta de JpC y la Crida para ir de número dos de Forn, pero el Pdecat no ve esa opción con buenos ojos.
Y la cuestión no es baladí, porque con Forn en prisión y a las puertas del juicio, hay muchas probabilidades de que sea el segundo de la lista el que tenga que asumir el liderazgo del grupo municipal o, si se diera el caso, la alcaldía.
El caso es que, mientras que Esquerra tiene definida su apuesta municipal, el conjunto del entorno postconvergente y puigdemontista vuelve a reclamar a los de Junqueras que se sumen a una lista conjunta a la vez que sigue enfrascado en trifulcas internas y sin ponerse de acuerdo en la suya.