Puigdemont pidió en 2019 retirar las sanciones a Rusia por la invasión de Crimea
El expresidente catalán exigió que se abandonaran las sanciones económicas para tejer una nueva era de alianzas "entre Oriente y Occidente": "Es absurdo tener más problemas con la Rusia de hoy que con la Unión Soviética del pasado"
Aunque Puigdemont ahora se desmarca de Rusia, cuya invasión de Ucrania ha conmocionado a la sociedad Europa y ha abierto una crisis con la Unión Europea y con la OTAN, la postura del expresidente fugado ha ido cambiando. Aunque ahora apoya las sanciones al gobierno de Vladimir Putin, en 2019 pidió que se levantaran en una entrevista a la agencia Sputnik.
Puigdemont hizo referencia a las sanciones que estaban vigentes por parte de la Unión Europea tras la invasión de Crimea por parte de Vladimir Putin en el año 2014 –así como la tensión en las regiones separatistas de Donbass y Lugansk–, mucho más laxas que las aprobadas en los últimos días tras la invasión de toda Ucrania.
Para el prófugo, «Rusia y la Unión Europea» deben fortalecer sus relaciones: «Es absurdo tener más problemas con la Rusia de hoy que con la Unión Soviética del pasado». El presidente aseguró a la agencia de noticias rusa que el futuro pasaba a través del «diálogo y la cooperación entre Oriente y Occidente», y que mejorar relaciones era de «interés para ambas partes».
Abstención para el fondo de 1.200M€ de ayuda a Ucrania antes de la guerra
Puigdemont se manifestó crítico con las medidas tomadas por la UE tras la invasión rusa de Crimea, al reflejar su inutilidad para frenar a Putin: «Podemos ver los resultados». El prófugo aseguró que ese cambio podría ser el «primer paso» hacia una Europa «con mayor protagonismo» en la búsqueda de una solución a la «crisis ucraniana».
Una posición ambivalente con Rusia que mantuvo hasta pocos días antes de que comenzara la invasión de Ucrania. En una votación en el Parlamento Europeo, el prófugo se abstuvo de enviar ayuda financiera al país atacado por valor de 1.200 millones de euros. Su abstención se contrasta con la de ERC, que votó a favor, igual que sus compañeros Clara Ponsatí y Toni Comín.
La entrevista se dio en 2019 en una ‘gira’ por varios medios de comunicación rusos. Más allá de la concedida a la agencia Sputnik en noviembre de ese año, la primera entrevista fue en enero a manos del Komsomolskaya Pravda. Otra fue al medio Rossiya 24 en octubre, mientras que la última se concedió en Russia Today en diciembre.
Una cuestión que se detuvo en 2020, aunque se volvió a retomar en 2021. Aunque Carles Puigdemont todavía no ha hecho recuento oficial de cuántos medios le entrevistaron el año anterior, sí que ha dado alguna otra entrevista a medios de comunicación afines al régimen de Moscú.
Puigdemont en ‘Russia Today’: «La gente continúa en prisión y exilio»
Una de las últimas fue en Russia Today –la agencia de noticias rusa cuyas emisiones se han prohibido en toda la Unión Europea acusadas de desinformación–. En el programa Going Underground de Afshin Rattansi, el expresidente catalán aseguró que el «El deep state español actual es el mismo que en la época de Franco».
«No es la primera generación que se tiene que marchar al exilio, pero esperamos ser la última», aseguró Puigdemont en la entrevista. Además, defendió que mientras «la extrema derecha» defiende la unidad de España por nostalgia con el «franquismo», el independentismo siempre se sitúa en el ala «progresista».
Además, cargó contra el gobierno de Pedro Sánchez, al considerar todo seguía igual con el gobierno de PSOE y Podemos, en un momento donde todavía no había comenzado a andar la mesa de diálogo tras el parón de la pandemia y no se habían concedido los indultos a los condenados por sedición: «Nada ha cambiado, la gente continúa en la prisión y en el exilio».
Russia Today también se mofó de la operación militar Volhov, que investigada un presunto blanqueo de capitales por parte de dirigentes independentistas y que vinculaba a Josep Lluís Alay, el hombre de confianza de Puigdemont, con la Rusia de Vladimir Putin ya que, según publicó The New York Times, mantuvo contactos y se le ofrecieron 10.000 soldados tras la DUI.