Puigdemont no rechazó la ayuda de Putin y volvió a reunirse con emisarios rusos
Los emisarios rusos ofrecían al expresidente de la Generalitat ayuda económica para financiar la república catalana y 10.000 soldados
El expresidente de la Generalitat de Catalunya, Carles Puigdemont, no rechazó la ayuda del presidente Ruso, Vladirmir Putin, y se reunió más de una vez con emisarios rusos en los días previos del intento frustrado de proclamar la independencia en Cataluña en octubre de 2017.
La declaración judicial del exdirigente de Convergència, Víctor Terradellas, ante el juez Joaquín Aguirre, a la que ha tenido acceso El Periódico, revela que Puigdemont «no declinó» la ayuda de financiación de los rusos, sino que lo dejó en standby: «seguid hablando», le dijo a Terradellas.
«Hay una gente, el 23 o 24 de octubre de 2017, unos señores rusos, Sergey Motin y Jordi Sardà (empresario), se ponen en contacto conmigo y me piden ver al presidente de Catalunya. Yo hago de correveidile, y le digo: ¿Estos señores quieren verte, tú quieres verlos? Y en este caso dice que sí«, explica el exdirigente al juez.
Financiación para la independencia y ayuda militar
En sus encuentros con los rusos, estos les «proponen ayuda» para financiar una república catalana y «10.000 soldados rusos», declara el convergente. Además, explica que el expresident hace oídos sordos a la propuesta: «Puigdemont no quiere ni oír hablar de eso», justificando que su proceso era «cívico, pacífico y democrático».
Ante la pregunta del juez sobre la respuesta de Puigdemont, este asegura que «no dice nada» y mantiene su intención de seguir hablando.
«Nikolay se queda solo dos días porque ve que todo era broma»
Víctor Terradellas, exdirigente de Convergència
Días antes de la DIU el líder de Junts se reúne con el exdiplomático ruso Nikolay Sadovniko a través de Terradellas y con la intermediación de Sardà. En este encuentro, el emisario ruso ofrece ayuda económica de millones de dólares y ayuda militar, a cambio de poner en marcha un sistema de criptomonedas en una Cataluña independiente.
De hecho, en 2018, según los mensajes de Terradellas recogidos en la investigación del mismo medio y los medios Proyecto de denuncia de la corrupción y el crimen organizado (OCCRP), Bellingcat, Irpimedia (Italia), Istories (Rusia) y Il Fatto Quotidiano (Italia), él y Sardà estuvieron gestionando una transferencia de bitcoins que los rusos estaban dispuestos a aportar. Para probar que el dinero que le prometieron era real, Sardà le entregó a Terradellas un supuesto certificado de valores por valor de 500.000 millones de euros, aunque se verificó que era falso.
Los rusos se echan atrás
Para el negocio de las criptomonedas, por el que estaban especialmente interesados los rusos, Puigdemont pensó en Elsa Artadi, quien acaba de dejar Junts y la política por motivos personales. Terradellas declara que al día siguiente de la reunión con Sadovniko, «hubo una reunión con Elsa Artadi, ya no en el Palau, sino fuera del Palau».
No obstante, según explica el convergente, los rusos se echaron atrás al ver la poca organización y preparación que el independentismo tenía para la supuesta república catalana. «Cuando estos señores llegaron, proponen una reunión telemática con Putin. Cuando vieron que aquí no había nada preparado, nada….el modelo de financiación del nuevo estado catalán, el tema del banco central… Ellos reculan mucho. Nikolay se queda solo dos días porque ve que todo era broma», afirma Terradellas.