Puigdemont torpedea la mesa de diálogo con una llamada a la «inevitable» confrontación con España
El expresidente llama a un nuevo enfrentamiento con España y advierte contra los que "querrían pasar página"
Junts aborda con escepticismo la mesa de diálogo con Moncloa, que se celebrará la semana próxima en Barcelona –todavía sin fecha cerrada entre ambos Gobiernos–. Carles Puigdemont directamente la ha torpedeado con una carta a través de la cual ha llamado a la «inevitable» confrontación con el Estado: «No se puede rehuir, es una realidad inevitable para la que tenemos que pasar».
«No podemos hacer creer a la ciudadanía catalana que, por alguna razón que desconocemos, vendrá un momento en que nos será reconocida la nación sin tener que luchar desde las calles, plazas e instituciones del país. Pensamos lo que pensamos y votamos lo que votamos, las cosas sabemos que son de esta manera», explica Puigdemont en un comunicado.
Puigdemont insiste en que se tiene que movilizar al movimiento independentista «por todos los medios democráticos y no-violentos posibles. No les regalaremos ninguno, y por eso los tenemos que construir». Además, vuelve a poner en valor al Consell per la República como herramienta, pese a no llegar a los 100.000 socios a septiembre de 2021.
Puigdemont alerta contra los que «querrían pasar página»
«Reforzar el Consell ayuda a mantener la dignidad del 1-O ante todos aquellos que querrían pasar página. Ayuda a recordar al Estado Español sus vergüenzas democráticas, y tiene un Jefe que criminalizó y excluyó millones de ciudadanos». Para Puigdemont, este contexto «permite que no haya excusa para preparar la manera de ganar la próxima confrontación».
El expresidente fugado a Bélgica insiste en poner sobre la mesa la figura del Consell per la República, un ente que está pendiente de reformular en el pacto entre ERC y Junts para la investidura con el objetivo de que se convierta en el espacio de coordinación entre fuerzas independentistas.
«Sabemos, con la claridad que da la historia de las relaciones pretéritas y recientes entre Cataluña y España, que sólo hay un camino para conseguirlo. Y que no hay atajos edulcorados, suaves, inocuos. Enfrente tenemos a España, no a Canadá ni a Reino Unido», insiste Puigdemont.
Un órgano de fricción entre ERC y Junts
El órgano está pendiente de ser reformulado, aunque ERC se ha mostrado reticente de su papel al ser un órgano de parte claramente favorable a las tesis de Junts per Catalunya, cuyo líder es a su vez presidente del Consell per la República. Ahora, vuelve a arremeter contra el diálogo, una de las bazas de ERC.
Los republicanos juegan la carta de la mesa de diálogo como principal baza frente a Junts, que presiona para acortar el periodo de dos años que ERC fija como objetivo para sacar algún tipo de rédito de la mesa de diálogo, tras los indultos del procés y con los presupuestos generales y la Generalitat de fondo.