El PSOE apuesta por elevar el castellano en las escuelas de Cataluña donde esté menos presente

El Partido Socialista intenta huir de porcentajes fijos, después de que el Tribunal Supremo ordenase que el 25% de las clases que se imparten en los colegios de Cataluña deben realizarse en castellano. La formación aboga ahora por adaptar esta condición a las particularidades de cada territorio, en función del desarrollo sociolingüístico que presenten los diferentes municipios.

La portavoz del grupo socialista en el Senado, Eva Granados, ha defendido esta postura intermedia que le coloca entre las exigencias del independentismo y de la derecha. «Hay entornos en los que el castellano está muy presente y otros en los que no», ha explicado en una entrevista con Radio Nacional.

«Yo aprendí catalán y tengo un catalán normativo perfecto en la inmersión lingüística. Pero mi hijo ya habla un catalán de jaque. A mi hijo lo que hay que hacer es tener un poquito más de castellano para que garanticemos que tiene un buen nivel de castellano también», ha explicado.

La representante del PSC ha abogado por volver al modelo de inmersión lingüística que imperaba en Cataluña en la década de los años 80, pero adaptándolo a las particularidades que presenta actualmente cada región de la comunidad. «A nivel político, las políticas públicas se tienen que ajustar para conseguir los objetivos pedagógicos», ha remarcado.

«La situación de Canet no viene de la última sentencia, viene de antes»

Granados ha recordado que esta hoja de ruta ya estaba presente en la agenda política del anterior conseller de Educación, Josep Bargalló, que dejó su puesto tras las elecciones del 14 de febrero en Cataluña, para dar paso a su sucesor: Josep González. Ambos forman parte de la bancada de Esquerra Republicana.

«El anterior conseller de ERC tenía encima de su mesa un documento que planteaba cómo asegurábamos el conocimiento de las dos lenguas en una Cataluña tan diversa», ha esgrimido.

El PSC descarta una nueva ley para legislar el uso de las lenguas en Cataluña

Aunque Granados ha abierto la puerta a estudiar esta fórmula para adecuar el uso de las lenguas oficiales en función de cada territorio, la senadora no está dispuesta a que se apruebe una nueva ley para legislarlo. «No hace falta hacer un debate en el Parlament. Es suficiente con que haya voluntad política y tenemos una sentencia que nos ayuda a eso», ha apuntado.

La portavoz parlamentaria también ha exigido al resto de las fuerzas políticas que rebajen el «tono» del debate sobre las lenguas para buscar una solución de consenso. «Lamento que la derecha en nuestro país y el independentismo radical en Cataluña, porque los polos se atraen, se dediquen a inflamar una situación», ha subrayado.

A pesar de sus críticas, Granados ha insistido en que la Generalitat está cumpliendo con la sentencia sobre el castellano. «Otra cosa es que decidan hacer del catalán y de la lengua un tema político para continuar haciendo confrontación entre nacionalismos», ha agregado.