El PNV roba la cartera al soberanismo con su apoyo a Rajoy
Los nacionalistas vascos cierran un acuerdo con el Gobierno para aprobar los presupuestos de 2017 que incorpora la renovación del cupo vasco
Cinco diputados. Seriedad, negociación y pacto. El PNV ha hecho valer todo su poder en el Congreso y avalará las cuentas del Gobierno para 2017. Eso sí, el apoyo de los nacionalistas vascos implica la renovación del cupo vasco. El ‘robo de cartera’ del nacionalismo vasco, frente a la estrategia de los soberanistas catalanes, el Pdecat y ERC –fuera de órbita en el Congreso– es una evidencia. El PNV no lograba renovar el cupo desde 2007.
El régimen foral, del que disfruta el País Vasco y Navarra, no implica un trato diferente respecto al resto de comunidades. El problema no es el concierto económico de las autonomías forales, sino el cupo, el montante que se acuerda según el cual el País Vasco paga al conjunto del Estado por las competencias no transferidas, como Defensa, Asuntos Exteriores o infraestructuras como puertos y aeropuertos. Ahora, gracias al apoyo a los presupuestos del Gobierno, ese cupo se renueva, como mínimo, por cinco años más.
El pacto al que ha llegado el Gobierno con el PNV incluye, por tanto, una rebaja del cupo, y la devolución de 1.400 millones de euros. También una partida de 4.000 millones de euros, que corresponde, en su gran parte, con 3.380 millones de euros hasta 2023. Se trata de la principal infraestructura ferroviaria, la denominada Y vasca que conectará las tres capitales de provincia en alta velocidad. Entre 2023 y 2025 se acabarán las obras en las estaciones de las tres capitales, Bilbao, soterrada, Vitoria, de forma parcial, y San Sebastián, en plataforma.
El cupo que paga el País Vasco al Gobierno se reducirá de forma notable
El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, no lo ha podido decir más claro. “Hay que poner este acuerdo en valor, era una ocasión que no podíamos desaprovechar”, ha asegurado. La posición del PNV es que ha tratado de negociar esa renovación del cupo desde 2007, y que ahora lo ha conseguido. “Dede luego que no seré yo quien establezca una unión entre la situación del PP y el acuerdo. Llevamos buscado eso desde 2007”, ha sentenciado Erkoreka. En términos coloquiales, eso implicará que ese cupo se reduzca de forma notable, es decir: el gobierno vasco pagará menos al Estado por esas competencias no transferidas y que las presta el Gobierno central.
Rajoy gana, por lo menos, dos años de margen con la aprobación de las cuentas de 2017
Con el acuerdo, los cinco diputados del PNV permitirán al PP rechazar las enmiendas a la totalidad a los presupuestos de los diferentes grupos parlamentarios. Con ello, se permite que las cuentas sigan el trámite parlamentario, y que, por tanto, salgan adelante. Ello, en la práctica, y en el peor de los casos para el Gobierno del PP, supone contar con un presupuesto en 2017 y con la prórroga de éste para 2018, con lo que gana dos años de gobierno. En cualquier caso, Mariano Rajoy siempre podría adelantar las elecciones, pero dispone ya de la tranquilidad de unas cuentas que le deben permitir cumplir con las exigencias marcadas por la Comisión Europea.