Pedro Sánchez presume de haber cumplido uno de cada tres compromisos
El presidente del Gobierno tan sólo ha completado el 13,1% de las propuestas pactadas con sus socios de Unidas Podemos
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentó este jueves un balance triunfalista de legislatura y a la vez sacó pecho de haber cumplido uno de cada tres compromisos presentados por el Ejecutivo. De las 1.463 promesas presentadas, ya se han activado el 94%, según ha expuesto.
El jefe del Ejecutivo explicó que este informe se ha elaborado gracias a una «metodología validada» por un grupo conformado por 12 «expertos independientes de reconocido prestigio», los nombres de los cuales no ha dado a conocer.
El Gobierno los añade en el informe de metodología y afirma que los trasladará a la prensa junto al informe esta tarde. Por el momento, fuentes gubernamentales avanzan que nueve de estos profesionales son los que asesoraron al Gobierno en diciembre y tres de ellos los ha incorporado recientemente Moncloa provenientes de universidades y «respetando la igualdad de género», avanzan.
Los nombres de estas tres incorporaciones son: Cristina Ares Castro-Conde, de la Universidad de Santiago de Compostela; el profesor Ignacio Aymerich Ojea de la Universidad Jaume I (Castellón) y Dolors Canal Ametller de la Universidad de Girona.
El presidente también espera que en diciembre se cumplan menos de la mitad de los acuerdos negociados con sus socios de Unidas Podemos, un 41,6%, e informó que, por el momento, se ha cumplido el 33,4% de medidas pactadas en el acuerdo del Gobierno de coalición.
Una cifra irrisoria y que no avanza si la comparamos con la que el presidente dio el 20 de diciembre de 2020. Sánchez, en ese balance, expuso hace un año que había cumplido el 20,3% de los puntos con sus socios. Es decir, que en un año tan sólo ha llegado a completar el 13,1% de las propuestas pactadas con Podemos.
Sánchez no asume los errores de la quinta ola
El jefe del Ejecutivo también habló sobre la pandemia para presumir del ritmo de vacunación de España. «Ayer sobrepasamos el 55% de la población española con pauta completa», deslizó en su intervención y añadió que «somos la nación que más ha vacunado entre los 50 países más grandes del mundo».
Por el contrario, Sánchez se olvidó de hacer autocrítica de los errores cometidos con la gestión de la pandemia y, en especial, en esta quinta ola, donde en dos semanas se han triplicado los ingresos en planta y quintuplicado los de la UCI.
A preguntas de los periodistas, el presidente insistió en que «el virus sigue aquí y sigue contagiando, por lo que no debemos de bajar la guardia». Según Sánchez, «se empieza a estabilizar la curva de contagios y la vacunación es el instrumento que nos va a permitir superarla».
El presidente insistió en que el 70% de la población estará vacunada a finales de verano, pero reconoció que ese porcentaje será superior para alcanzar la inmunidad de grupo.
Culpa al PP por no renovar el CGPJ
Entre los compromisos incumplidos por el Gobierno se encuentra la renovación de los principales órganos constitucionales como son el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el Defensor del Pueblo, el Tribunal de Cuentas o el Tribunal Constitucional (TC).
Como si no fuera cosa del Gobierno, Sánchez echó balones fuera ante las preguntas de los periodistas y recalcó que «el PP cumpla con la Constitución, no depende del gobierno sino del PP».
Pero lo cierto es que ya se cumplen 968 días sin renovar el CGPJ y el presidente del Gobierno sigue sin responder qué planes tiene en caso de que los populares sigan sin cerrar el pacto y de cara al año que viene.
«Discreción» y silencio sobre Marruecos
Otro de los asuntos que más preocupa en la oposición es la imagen internacional de España. Preguntado sobre la crisis con Marruecos, Sánchez ha pedido «discreción» y no ha querido contar nada acerca de cómo se están desarrollando las conversaciones con el país vecino en aras de solucionar la crisis diplomática.
«Pero reafirmar lo que he dicho en muchas ocasiones y es que Marruecos es, evidentemente, un socio estratégico para nuestro país», apostilló el presidente.
La postura de Sánchez va en la línea de la marcada por el nuevo ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quien relevó a Arancha González Laya en la remodelación del Gobierno acordada por el presidente a mediados de julio.
En su primera visita al extranjero en Londres el pasado día 21, Albares eludió dar detalles de cómo se está intentando remediar el choque con Marruecos y se limitó a pedir que se «deje a la diplomacia trabajar tranquilamente», porque se necesitan «resultados y no titulares estridentes».
La crisis diplomática tuvo su desencadenante en la presencia del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, en España a finales de abril tras ser ingresado de manera secreta en un hospital de Logroño. El país magrebí reaccionó permitiendo que una avalancha de inmigrantes irregulares entrara a nado en Ceuta los días 17 y 18 de mayo.
Tras este episodio, Rabat llamó a consultas a su embajadora en Madrid Karima Benyaich, después de que fuera convocada a la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores en Madrid. Nada más se sabe por el momento y el presidente prefiere guardar silencio.
Vuelve al «no dejar a nadie atrás»
En su discurso el jefe del Ejecutivo apela a la unidad de los españoles y al «no dejar a nadie atrás» para salir de la pandemia y de la crisis económica. Como si de la marca Mr. Wonderful se tratara, los asesores de Sánchez insisten en dejar claro un discurso en positivo con frases ‘maravillosas’ enfocadas hacia la recuperación económica.
Según el jefe del Ejecutivo, el que ya se haya cumplido un tercio de los compromisos, demuestra que el Gobierno está decidido a «avanzar hacia un futuro mejor, sin dejar a nadie atrás» y cumple sus promesas. De igual modo, ha hecho un llamamiento para que todos remen en la misma dirección.
«No nos vamos a detener. Y si alguien quiere instalarse en la negatividad, en el pesimismo y en la confrontación, no van a encontrar al Gobierno», recalcó Sánchez.
Ha añadido que tras los meses duros de la pandemia y ante la fase de recuperación que se abre, «es el momento en el que cada uno debe decidir si desea avanzar o bloquear el deseo mayoritario de la sociedad española de avanzar». El típico truco político que ya utilizó Felipe González en su famoso vídeo del doberman en campaña para retratar a la oposición como «los malos». Según Sánchez y su balance, España apunta en línea recta hacia la recuperación.