Sánchez echa a Iván Redondo tras las debacles de Madrid y Murcia

Pedro Sánchez cambia de ‘spin doctor’. Iván Redondo, el hombre que le hizo recuperar la secretaría general del PSOE y le llevó hasta La Moncloa, dejará de ser su director de Gabinete dentro de la remodelación que anunciará este sábado el presidente del Gobierno. La fallida moción de censura en Murcia y la campaña en Madrid han pesado en la decisión del jefe del Ejecutivo.

Nadie en Moncloa podía imaginar una decisión así hace apenas cuatro meses, cuando se preparaba lo que parecía un golpe definitivo contra el liderazgo de Pablo Casado en el PP. Iván Redondo Y Félix Bolaños diseñaron en marzo una moción de censura en Murcia para arrebatar, junto a Ciudadanos, uno de los cuatro gobiernos autonómicos en manos del Partido Popular.

La jugada parecía perfecta e iba a suponer un durísimo revés para Casado y también para su número dos, Teodoro García Egea, principal valedor del presidente murciano, Fernando López Miras. El respaldo de Inés Arrimadas a la maniobra parecía blindar el éxito de la misma, pero ahí estuvo el error de cálculo: la presidenta de Ciudadanos no tenía control sobre sus seis diputados en Murcia y el pacto de tres de ellos con el PP hizo fracasar la moción.

El segundo grave error fue no anticiparse a posibles consecuencias en otros territorios: cuando Moncloa y Ferraz movilizaron a Ángel Gabilondo para que presentara una moción de censura contra Isabel Díaz Ayuso, Íñigo Errejón ya había presentado la suya… y la presidenta de la Comunidad de Madrid ya había disuelto la Asamblea y convocado elecciones para el 4 de mayo.

La campaña para las elecciones autonómicas se convirtió en la oportunidad de Iván Redondo para redimirse. Tras el éxito de la ‘operación Illa’ en Cataluña, director de Gabinete lideró el diseño de la misma durante los primeros días. Suya fue la autoría del spot de «Soso, serio y formal» de Ángel Gabilondo, muy aplaudida por el partido y los líderes de opinión. No obstante, el candidato no remontaba en las encuestas.

Fue entonces cuando Redondo dio un paso atrás y desde Moncloa se empezó a señalar al propio Gabilondo como el principal hándicap que impedía una remontada en las urnas. Después llegó la activación de la «alerta antifascista» tras las amenazas a Pablo Iglesias, Fernando Grande-Marlaska y Reyes Maroto. Fue un intento de recuperar la estrategia posterior a la ‘foto de Colón’ de 2019. Pero esta vez la estrategia no funcionó.

Cuatro años de éxitos con dos grandes derrotas finales

Ya en mayo, dirigentes nacionales y autonómicos del PSOE empezaron a señalar a Iván Redondo como el principal culpable de lo ocurrido en Madrid y Murcia. Se activó entonces, desde Moncloa, la segunda ‘operación diálogo’ con Cataluña, que incluía la aprobación de los indultos.

Ese movimiento ya estaba contemplado para la presente legislatura, pero los acontecimientos se precipitaron tras el 4-M. Muchos cargos del Gobierno que este sábado serán cesados asumieron un desgaste necesario para que Pedro Sánchez volviera a retomar la iniciativa política.

Uno de ellos es el propio Iván Redondo. Otro, el ministerio de Justicia, Juan Carlos Campo. Ambos saldrán del Ejecutivo, y serán sustituidos por Óscar López y Pilar Llop, respectivamente. Dos personas «de partido», tal y como reclamaban altos cargos del PSOE.

Se pone fin así a cuatro años de trabajo entre Pedro Sánchez e Iván Redondo. El asesor de cabecera del hoy presidente del Gobierno fue fichado para ganarle las primarias del PSOE a Susana Díaz y para convertir a Sánchez el presidente del Gobierno.

Logró ambos objetivos y, después, ganarle al PP dos elecciones generales y las elecciones autonómicas, municipales y europeas de mayo de 2019. Lo ocurrido en Madrid y Murcia, sin embargo, ha supuesto un triste epílogo para un tándem que se ha mantenido engrasado desde comienzos de 2017.