PSC y Pdecat frenan sus mudanzas de sede por si hay elecciones
Los partidos de Miquel Iceta y Artur Mas esperarán a que se concrete el calendario electoral antes de trasladarse a las nuevas sedes
La incertidumbre electoral frena el cambio de sede de dos partidos catalanes. Pdecat y PSC quieren evitar que la convocatoria de unas elecciones, con la consiguiente campaña electoral, les pille en plena mudanza. Los socialistas vendieron el año pasado su cuartel general de la calle Nicaragua en Barcelona con la intención de trasladarse a una nueva sede en la calle Pallars, pero todavía no han decidido en que fecha se mudarán.
Fuentes del partido de Miquel Iceta indican que las obras de reforma de estas oficinas aún no han finalizado y que sería una temeridad preparar el traslado cuando no está claro el calendario electoral. No se irán hasta que saber si el presidente catalán, Carles Puigdemont, convoca elecciones.
Estas fuentes precisan que en el contrato de venta del edificio de la calle Nicaragua no se establece ninguna fecha límite para abandonarlo. Sin embargo, insisten en que piensan mudarse antes de finalizar este año. La nueva sede del barrio del Pobleu, de unos 1.500 metros cuadrados es mucho más pequeña que la actual, en les Corts, que ocupa todo un bloque con 4.700 metros cuadrados.
Pendientes de la sentencia del caso Palau
El Pdecat de Artur Mas también planea cambiar de sede, pero todavía no ha decidido donde instalará su cuartel general. En el «consell nacional» del pasado julio aprobaron vender su actual sede de la calle Provenza, pese a que se mudaron tan sólo hace un año.
El edificio es propiedad de la vieja Convergència (CDC), que está pendiente de una posible condena millonaria como responsable civil por el caso Palau. Ahora buscan un local más pequeño y asequible.
El partido de Mas cuenta en estos momentos con 54 empleados. La mayor parte están contratados por la vieja CDC y sólo una pequeña minoría lo están por el nuevo Pdecat. Los trabajadores temen que se aproveche el cambio de sede para recortar todavía más la plantilla.
Desde el pasado octubre han prescindido de 31 puestos de trabajo y la intención de la gerencia, según fuentes internas, es quedarse tan sólo con 25 empleados. Ahora les sobrarían 29. El Pdecat no consigue llegar a final de mes.