Pablo Casado, tras la mesa de diálogo: «Sánchez humilla a España»
El líder del PP criticó la incoherencia que veía entre las declaraciones de los presidentes después del encuentro: "Aragonès denuncia represión y Sánchez dice que ha merecido la pena"
La mesa de diálogo demostró que las posturas del Gobierno central y el Govern catalán están muy alejadas. Lo reconoció el propio Pedro Sánchez después de que de nuevo Pere Aragonès reivindicara un nuevo referéndum para la autodeterminación. Aún así, el presidente del Gobierno aseguró que la reunión «había merecido la pena». Y esta afirmación enfadó a los populares.
Su líder, Pablo Casado, señaló que este encuentro con los independentistas era la forma que tenía el jefe del Ejecutivo de «humillar a España para seguir en el poder con votos separatistas». Así lo señaló en su cuenta de Twitter anoche tras remarcar la incoherencia que veía entre las declaraciones de ambos presidentes.
«Aragonès denuncia ‘represión’ y exige ‘amnistía y referéndum’, mientras Sánchez dice que ‘ha merecido la pena’”. Esta fue la conclusión a la que llegó el PP tras el diálogo entre ambas instituciones.
Horas antes de que la reunión tuviera lugar en el Palacio de la Generalitat, el líder de la oposición calificó la mesa de diálogo de una «infamia por la independencia». En la primera sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, Casado soltó una retahíla de reproches a Sánchez «por sentarse con los independentistas para pactar un referéndum», pero también por la subida del precio de la luz y el bloqueo en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
“Se sientan a negociar un referéndum con los que jalean a los terroristas que quieren atentar contra el Partido Popular y a los radicales que incendian Barcelona una vez más”. “¡Menudo reencuentro!”, exclamó para después añadir que es incapaz de resolver los problemas de los españoles ya que él se había convertido «en el principal problema de España».
Críticas de Abascal y Arrimadas
El presidente del PP no fue el único dirigente de la oposición que criticó la reunión de Sánchez con Aragonès y la retirada de la bandera española antes de la comparecencia del president de la Generalitat.
Santiago Abascal compartió el mismo vídeo que Casado en Twitter y afirmó: «Esto es lo que pasa cuando le debes tu cargo a delincuentes y golpistas. La unidad de España ni se vota, ni se negocia, ni se discute. Sánchez, dimite». Inés Arrimadas, por su parte, usó esas imágenes para ironizar sobre el reencuentro que defiende Sánchez:
Sánchez pide no poner plazos
A Pedro Sánchez no parecieron molestarle las críticas del presidente popular. En la sesión de control se limitó a ironizar con las tensiones internas del PP y no hizo referencia a la mesa de diálogo. “Me queda claro que no van a arrimar el hombro en lo que queda de legislatura, se fue con crispación, ha vuelto con crispación”, respondió a Casado.
En la rueda posterior al encuentro en Barcelona, explicó que el Govern se mantenía firme en sus exigencias de “autodeterminación y amnistía” y, por tanto, la solución al “conflicto político” la veía más que lejana. Tanto es así, que el jefe del Ejecutivo pidió “no poner plazos” para llegar a un acuerdo. Pese a ello, ha defendido que la situación en Cataluña, tras los indultos, es mejor que tras el 1-O de 2017 y la sentencia del Supremo.
El jefe del Ejecutivo reivindicó el “diálogo” como el único medio para llegar a un entendimiento con el Govern y aseguró que había elementos que unían a la población de Cataluña con la del resto de España. En concreto, destacó que los dos gobiernos y los ciudadanos coinciden en los objetivos de superar cuanto antes la pandemia, salir de la crisis económica, y aprovechar la “oportunidad” que representan los fondos europeos.