Casado calma la guerra interna del PP en una cena con todos los diputados
El presidente de los populares se reúne con todo su grupo parlamentario en un restaurante, tras varias jornadas de batalla interna por el congreso de Madrid
Pablo Casado ha movido ficha para tratar de calmar las aguas en el Partido Popular, después de la guerra interna que se ha desatado por el liderazgo en la Comunidad de Madrid. El presidente de la formación asistió este miércoles a una cena con la mayoría de diputados de su grupo en el Congreso para escenificar una situación de normalidad.
La cita tuvo lugar en un restaurante cercano a la cámara, después de la primera jornada del debate parlamentario sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Al encuentro asistieron todos los miembros de la dirección nacional del partido, a excepción del secretario general, Teodoro García Egea, según ha publicado la Cadena SER.
La cena informal permitió a varios de los asistentes exponer en privado su preocupación por la pugna que se ha despertado en el partido por las maniobras de Isabel Díaz Ayuso para intentar adelantar el congreso del PP en el que se elegirá al nuevo presidente de la formación en Madrid. Algo que no ha gustado en Génova que se aferran al calendario original.
La cena fue una vía de escape para que los diputados pudieran comentar este enfrentamiento interno, después de haberse visto obligados a sortear las preguntas de los periodistas sobre el tema a lo largo de toda la jornada para no desviar la atención de la labor de oposición contra las cuentas que presentó el Gobierno de Pedro Sánchez.
Casado y Ayuso se aferran a sus equipos más fieles en plena pugna del PP
La decisión de Casado de acudir finalmente a la cena que ya llevaba tiempo convocada por los propios diputados le permitió arroparse de su bancada en el Congreso. Más allá de las conversaciones internas, es una manera para demostrar unidad entre el equipo que le acompaña a diario en la labor de oposición en el Congreso.
El gesto se produce después de que Ayuso también haya logrado cerrar filas en su bastión, durante la última reunión de la ejecutiva regional de Madrid. La baronesa acudió al cónclave la semana pasada con el objetivo de lograr una mayoría suficiente de apoyos para mantener sus exigencias de adelantar el congreso regional y lo consiguió.
Pese a estos movimientos estratégicos de filas, en público todos los implicados en esta batalla interna siguen manteniendo el tono, incluido José Luis Martínez Almeida. El alcalde madrileño, que suena en las quinielas como el hipotético rival de Ayuso para dirigir el partido en la autonomía, lleva semanas mandando mensajes para no desgastar la imagen de la formación con los enfrentamientos.