Operación PSC: encaje “singular” de Catalunya sin reformar la Constitución
Los socialistas catalanes se acogen al discurso del Rey y piden al PSOE que “detalle” todas las reformas que defiende de la Carta Magna
El PSC no quiere perder su seña de identidad. Es un partido catalanista, que respondió a los deseos de libertad de los catalanes, con la recuperación de la Generalitat. Pero no es independentista, y se ha visto atrapado en una situación política que ha liderado CiU y ERC con el derecho a decidir. El hecho es que las directrices de la cúpula, que encabeza Pere Navarro, que se vieron respaldadas por un consejo nacional extraordinario, están siendo contestadas por numerosos municipios de todo el territorio, y no sólo en la Catalunya central o en las comarcas de Girona. A Navarro los cuadros y militantes del PSC le piden que busque una alternativa, catalanista y posible, al proyecto independentista de CiU y ERC.
Por ello, el discurso del Rey Juan Carlos de este año ha sido especialmente pertinente para los socialistas catalanes. El hecho de que el Rey reclamara “las reformas necesarias” para solventar el problema que ha planteado el movimiento soberanista catalán, sin, todavía, entrar de lleno en una reforma de la Constitución que nadie sabe cómo puede acabar, supone para la dirección del PSC una ratificación de sus posiciones.
Orden interno
Ello es de vital importancia para buscar una salida ante otra situación complicada de orden interno: el próximo 16 de enero, en el pleno del Parlament, CiU, ERC, ICV y la CUP defenderán el derecho a decidir y aprobarán trasladar al Congreso la petición para poder celebrar la consulta, fijada para el 9 de noviembre de 2014.
El PSC no quiere votar a favor de esa propuesta, al entender que está condenada al fracaso, porque no se ha buscado un acuerdo previo con el Gobierno central. Pero los diputados del sector crítico, los que hicieron caso omiso en una votación similar en enero de 2013, buscan cómo defender sus posiciones de nuevo. Se trata de los cinco diputados díscolos, que todavía no saben qué decisión tomarán: Àngel Ros, Rocio Martinez, Joan Ignasi Elena, Marina Geli y Núria Ventura.
Encaje específico
El portavoz parlamentario del PSC, Maurici Lucena, defendió este jueves el proyecto del PSC, al entender que una reforma de la Constitución, que se sigue defendiendo con intensidad, requerirá su tiempo, y que lo prioritario es alcanzar acuerdos políticos que supongan “una redefinición singular y específica del encaje de Catalunya en España”. Ello debería ser “un paso previo” a la reforma constitucional.
¿Es eso lo que defendió el Rey Juan Carlos? Lo que afirmó en su discurso de Navidad es que debe haber soluciones políticas, con “cesiones” por parte de todos. Pero es cierto que la situación política que se vive en Catalunya es producto de una reacción, en parte de la propia ciudadanía y en parte también de las cúpulas de los partidos nacionalistas, tras la sentencia del Tribunal Constitucional del Estatut, en 2010, que pretendía ese encaje particular.
Blindaje en lengua y cultura
Lucena, criticado internamente por algunos miembros del PSC por defender posiciones contundentes que no han sido avaladas previamente por las ejecutivas del partido –dijo que en el referéndum soberanista optaría por la abstención, al considerar que no sería una consulta legal”–, quiso concretar.
Y reclama que Catalunya pueda conseguir un blindaje de las competencias en lengua y cultura y una financiación a medida, o mucho mejor a la actual y estable. El PSC cree que, con esos cambios, la mayoría de la sociedad catalana podría estar satisfecha, dejando de lado la opción independentista.
El PSOE debe ‘mojarse’
Al mismo tiempo, el PSC quiere ahora que el PSOE concrete también qué reformas querría realizar de la Constitución. Es lo que le pide, de hecho, el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que no rechaza, por principio esa reforma, pero quiere saber para qué y qué reformas exactamente.
En eso está la dirección del PSC, consciente de que no puede quedarse en un rechazo frontal a todo, en un ‘no’ a las peticiones que irán formalizando cada día CiU y ERC en el Parlament.
La decisión de ‘los cinco’
No se trata de contentar o no, según fuentes del PSC, a los cinco diputados que siguen reflexionando sobre su actuación del 16 de enero. Cada uno de ellos tiene intereses diferentes, y todavía no han decidido una posición común. Desde Rocío Martínez, que piensa en las elecciones primarias para la alcaldía de Barcelona, a Joan Ignasi Elena, más dispuesto a tomar una decisión drástica, pasando por Ros, que quiere continuar como candidato a la alcaldía de Lleida.
De lo que se trata es de que el PSC pueda seguir siendo un partido político útil para la ciudadanía catalana, la que no quiere la independencia de Catalunya, pero tampoco una situación de conflicto permanente, sin avances tangibles.