Obama despide en España para dar trabajo a sus militares
Los nuevos contratos en las bases militares contemplan recortes y despidos para primar a estadounidenses
Las bases aéreas estadounidenses en España están dejando de generar uno de los pocos beneficios que aportaban a las comunidades donde están asentadas: la creación de empleo. Las nuevas contrataciones de las bases aéreas de Morón de la Frontera (Sevilla) y Rota (Cádiz) contemplan recortes presupuestarios, despidos y la sustitución de personal de mantenimiento español por militares estadounidenses.
La contraprestación económica por la cesión de soberanía, pactada por ambos gobiernos, ha comenzado a diluirse. La convocatoria del último servicio de mantenimiento en la base de Morón apenas alcanza los 87.000 euros por los trabajos de los próximos 11 meses, una cantidad insuficiente para la creación de empleo.
Los trabajos de carga y descarga y la reposición de combustible de los aviones ya no son realizados por personal español contratado sino por militares americanos. La fontanería, carpintería y electricidad también han pasado a manos del ejército.
Rebaja salarial encubierta
La base aérea de Morón había aplicado un expediente de regulación de empleo, ERE, en 2010 que había afectado a 119 trabajadores. El año pasado se desligó de otros 66 empleados pero los despidos fueron declarados improcedentes por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Meses después, la empresa encargada de los recursos humanos en la base, Vinnell-Brown & Root (VBR), ha ido contratando a 60 afectados por el ERE pero con salarios un 30% inferiores a los que disfrutaban antes de los despidos, según han denunciado los sindicatos.
La menor fuerza laboral contrasta con una mayor actividad y con el aumento de las tropas en 50% durante este año por la mayor respuesta que Estados Unidos quiere dar a las crisis africanas.
Mucho alquiler y poco trabajo
Los sindicatos han comenzado a organizar protestas porque la cesión de soberanía española, a su juicio, apenas recibe contraprestaciones económicas. “Está bien que los militares estadounidenses alquilen casas en la zona. Es una fuente de ingresos para las familias, pero el Gobierno español tendrá algo que decir por la importante pérdida de puestos de trabajo que se está produciendo”, explica Jesús Carmona, miembro de la sección sindical de UGT en la base aérea de Morón, que participó este miércoles en una protesta frente a la Embajada de Estados Unidos en Madrid.
En el 2010, la plantilla de la base de Morón sumaba los 600 empleados. Ahora no alcanza los 200, según los trabajadores. La base de Rota (Cádiz) también ha perdido empleo a pesar de la instalación del escudo antimisiles aprobado por el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero con la promesa de creación de puestos de trabajo. En los últimos dos años, la base ha pasado de 1.100 trabajadores a menos de 900, según los representantes sindicales.
El gobierno de Barack Obama decidió hace dos años una política de incentivo al empleo estadounidense en las bases americanas fuera de su territorio nacional.