«O el Govern ha hecho un teatrillo o les interesa que las elecciones sean el 14-F»
El partido Izquierda en Positivo, cuyo recurso contra el retraso electoral fue estimado por el TSJC, ofrece una alternativa a Pere Aragonès para no votar el 14 de febrero
Hace una semana, las elecciones catalanas estaban aplazadas al 30 de mayo y así lo recogía el decreto de la Generalitat que había firmado Pere Aragonès por la noche, tras decidirlo en una reunión con los demás partidos pero sin haberlo consultado siquiera con la Junta Electoral. Hoy, los comicios siguen convocados para el 14 de febrero.
Ha sido después de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) estimara dos recursos contra el decreto que el aplazamiento electoral quedó en nada. La justicia presentará su resolución final el 8 de febrero; es decir, el lunes de la misma semana en que los catalanes están, en principio, llamados a votar, con la Covid-19 totalmente descontrolada.
Pero el futuro cercano no tiene que ser así. Esa es la posición de Izquierda en Positivo, un partido que concurrirá por primera vez a las elecciones y cuyo recurso fue uno de los dos que estimó el TSJC. El otro lo presentó Josep Asensio, un abogado y exagente de los Mossos d’Esquadra. Las cautelares solicitadas en estos recursos frenaron el retraso electoral.
El secretario general de Izquierda en Positivo, Miguel del Amo, ha explicado a Economía Digital su propuesta de que el Govern contacte con los recurrentes para fijar una nueva fecha electoral no tan lejana como el 30 de mayo pero tampoco tan próxima como el 14-F. Aragonès aún no le ha llamado, pero su teléfono está a su disposición «las 24 horas», dice.
«Confiamos en que nos llamen. O se vota el 14-F o se pacta con las partes recurrentes para que quiten el recurso y se vote en otra fecha», ha explicado, matizando que no se ha contactado con Asensio, el exMosso que también recurrió, al entender que esa gestión le corresponde al Govern. La «fecha orientativa» que su partido propone para los comicios es el 28 de marzo.
La propuesta es sencilla: si Aragonès asume su «error» de publicar un decreto de suspensión electoral «mal hecho» y acepta convocar las elecciones en marzo, Izquierda en Positivo retirará su recurso. Y si la Generalitat convence al otro recurrente, el TSJC ya no tendría razones para continuar el proceso, pues estos recursos —con cautelares— son los únicos estimados.
«Esperamos que el Govern conteste»
Del Amo ha relatado que esta oferta pensaban hacerla desde el momento de presentar el recurso, pero han esperado a que el TSJC se pronunciase para anunciarla. Al tratarse de un partido extraparlamentario, cuando se convocaron las elecciones del 14-F tuvieron que buscar los avales para poder presentar su papeleta y que sus listas se publicaran en el BOE.
«Y a tres días de que se publicaran las listas oficiales se suspenden las elecciones, y teníamos que empezar de nuevo y aparte el decreto del Govern se abría a cambios en las listas electorales», recuerda, explicando por qué recurrieron en primer lugar. «No explicamos entonces que nuestra intención era poder después abrir la puerta a atrasarlas en una fecha pactada».
Ahora, que el TSJC ha estimado las cautelares de su recurso y del del citado abogado, Izquierda en Positivo ha hecho pública su oferta, pero aseguran que era su intención desde el inicio. «Yo esperaba que [desde el Govern] nos contestaran, y espero todavía que sí. Si no, no entendería que no abriesen la posibilidad que yo creo que pide la mayoría de catalanes».
Si Aragonès no demuestra voluntad, a su juicio, hay pocas conclusiones a las que se puede llegar. «O el Govern ha hecho un teatrillo o les interesa que las elecciones sean el 14-F», especula Del Amo, insistiendo en que no se explicaría que al menos se escuche la propuesta. «La única manera de que no se haga el 14-F sería que las dos partes retirásemos el recurso».
«La Generalitat tendría que admitir que lo ha hecho mal»
En el caso hipotético de que Aragonès coja el teléfono y pida una reunión con Izquierda en Positivo, e hiciera lo propio con el segundo recurrente, lo primero que debería hacer es «admitir que lo ha hecho mal y hacerlo bien, no aferrarse a lo que están diciendo de que es ‘otro 155‘ o que ‘es culpa del PSC‘… detrás nuestro no está el PSC», aclara Del Amo.
«La Generalitat podría hacer otro decreto, pediríamos que sea uno legal», añade, señalando que el decreto impugnado no aplazaba las elecciones sino que las suspendía sine die y abría la posibilidad de presentar otras coaliciones y listas. «Eso nosotros lo hemos parado, porque ellos no tienen potestad para suspender sino para aplazar».
«No quieren admitir que lo han hecho mal y son más felices diciendo ‘155’. Es palpable que lo han hecho mal: nuestra cautelar la aceptaron en una hora, muy claro lo deben tener. Estaba mal, es un decreto que es ilegal y creo que se podría buscar lo mejor para los catalanes», insiste, repitiendo que, «a menos de que les interese, es posible que no sean el 14-F«.
¿Y por qué proponen hacerlas el 28 de marzo? «Hemos propuesto esa fecha a título orientativo», responde Del Amo, dispuesto a negociar en ese sentido. La Generalitat propuso que fueran en mayo y todos los partidos con representación en el Parlament, menos el PSC, le apoyaron. «Pero [el epidemiólogo] Oriol Mitjà dice que en mayo será peor que ahora«.
En una rueda de prensa este viernes en Barcelona, Celia Cánovas, candidata de Izquierda en Positivo al Parlament, subrayó que su principal objetivo es llegar a un consenso y que las elecciones se realicen cuando se puedan garantizar las condiciones sanitarias y el voto del mayor número de catalanes.
Así las cosas, al menos uno de los dos recurrentes del aplazamiento electoral concuerda con el Govern en que las elecciones no pueden ser el 14 de febrero. «Planteamos que hay una solución legal para cambiarlo: solo exigimos que sea legal», dice Del Amo. «No queda mucho tiempo pero todavía estamos a tiempo para poner otra fecha y pedimos muy poco [a cambio]».