Navarro invita los diputados díscolos a apoyar el proyecto del PSC
Asegura que se siente dolido y que no permitirá que se dude sobre la defensa del derecho a decidir de los socialistas
“Espero que ellos también”. El primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha asegurado en el consejo nacional del PSC que quiere pasar página, olvidarse de lo sucedido en la votación sobre la resolución soberanista en el Parlament y mantener el proyecto socialista. Ha añadido que espera, precisamente, que los diputados díscolos –Rocío Martínez, Núria Ventura, Joan Ignasi Elena, Àngel Ros y Marina Geli– también pasen página y se decidan a apoyar el proyecto del PSC sin fisuras.
Porque eso es lo que pretende la dirección socialista, ejemplificada con las palabras de Pere Navarro. El PSC quiere mantener una línea concreta, y no apartarse de ella. No marginará a nadie, pero si hay un sector crítico, que se pueda alinear con las tesis de los cinco diputados que no votaron en contra de la resolución de CiU y ERC, como pedía la dirección, debe saber que no podrá forzar el camino emprendido.
«Resolución irreal, falsa y tramposa»
Navarro ha leído la resolución que el PSC elaboró sobre el derecho a decidir y que sólo votó el propio grupo socialista. El argumento del primer secretario es que el PSC defiende el derecho a decidir, pero no la soberanía previa, antes del referéndum que CiU y ERC pretenden convocar. Es como resolver la pregunta, con el propio enunciado. “La resolución de CiU y ERC es irreal, falsa y tramposa”, ha asegurado Navarro, dejando claro que no permitirá que se dude sobre la apuesta del PSC sobre el derecho a decidir, que le ha llevado, de hecho, a enfrentarse con el PSOE.
El primer secretario del PSC considera que Artur Mas es el president, pero quien ejerce en la sombra es el presidente de ERC, Oriol Junqueras.
Dolido con los críticos
Navarro se ha mostrado “dolido” por las críticas recibidas tras la votación en el Parlament, y por los reproches que le han llegado sobre la falta de democracia interna en el partido. Pero se ha mostrado dispuesto a seguir liderando el proyecto, al margen de lo que haga el sector crítico.
La percepción de ese mismo sector crítico es que la dirección del PSC está dispuesta a seguir una línea concreta, sin pretender expulsar a nadie, con el objetivo de que sean los descontentos los que vean que, en algún momento no tendrán cabida en el proyecto socialista.
El consejo nacional podría mostrar todos esos desencuentros, a la espera de ver quien puede intervenir, y de cómo se articula el sector crítico.