Navarro, como Hollande: quiere elevar el IRPF al 60% para rentas de más de un millón de euros
Fiscalistas y economistas ven la medida del PSC más política que recaudatoria
Los votos teóricos del PSC se pueden quedar en la abstención, o refugiarse en Ciutadans, o en el PP, o tal vez en ICV, o por qué no, pueden caer en manos de Artur Mas.
Los socialistas catalanes saben que se enfrentan a las elecciones más difíciles de su historia, y tratan de reaccionar, huyendo de la polarización que CiU ha planteado, entre soberanistas y españolistas, pero que el PP catalán ha acogido con fruición.
Y el candidato Pere Navarro se ha fijado, como en tantas otras ocasiones ha hecho el PSC, en la política francesa. Como François Hollande, Navarro quiere que la crisis no afecte sólo a las clases más populares y propone una mayor presión fiscal para los salarios más altos.
Equidad social
En concreto, el PSC desea subir el IRPF hasta el 60% para las rentas superiores a un millón de euros, como Hollande, aunque el presidente francés lanzó la medida para un periodo temporal de dos años, y el porcentaje lo elevó hasta el 75%.
El responsable económico del PSC en la campaña, el número dos de Pere Navarro en las listas al Parlament, Mauri Lucena, fue este jueves el encargado de explicar la popuesta.
Algo nervioso, era su primera comparecencia pública ante los medios de comunicación, y con la sensación de que el programa electoral que presente debe servir a medio plazo como bandera de enganche de un proyecto más apegado al eje izquierda-derecha que al nacional, –a corto plazo para el 25N es ya muy difícil que pueda cuajar– Lucena defendió el propósito del PSC: “Hablamos de equidad social y de igualdad de oportunidades, y eso es lo que los socialistas queremos asegurar”.
La fiscalidad más alta del mundo
La medida de elevar el IRPF al 60%, aprovechando la competencia de la Generalitat para aumentar el tramo autonómico del impuesto, supondría para Catalunya tener una de las fiscalidades más altas del mundo.
Ahora ya es alta, el 56% para rentas superiores a los 300.000 euros, cuando en Madrid es del 52% para las mismas rentas.
El PSC quiere marcar la agenda política, un poco a la desesperada, porque todo está centrado en el debate sobre la independencia.
Y, junto a la subida del IRPF para las rentas más altas, Lucena, que trabajó en diversas responsabilidades en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, ha lanzado un paquete económico que podría calificarse de netamente de izquierdas.
Propone el PSC, por tanto, recuperar el impuesto de sucesiones, que podría recaudar, según Lucena, 300 millones de euros, como ocurría antes de la reforma de CiU en esta legislatura, y con el modelo que aprobó el anterior Govern de José Montilla.
Junto a ello, defiende una modificación del impuesto de Patrimonio, para rebajar el mínimo exento de 700.000 euros a 500.000 euros, elevando moderadamente el tributo de forma progresiva.
Afán «confiscatorio»
Los expertos consideran que estas medidas no tendrían apenas efectividad recaudatoria. Ricard Riverola, socio del despacho Cuatrecasas, Gonçalves Pereira, especializado en asesoramiento en el ámbito del ‘private client’, considera que subir el IRPF puede rozar la pretensión “confiscatoria”, teniendo en cuenta la actual presión fiscal.
Y añade que “es evidente que podría haber una fuga de talentos”. Para Riverola las medidas económicas para salir de la crisis “no pueden pasar por los ingresos, sino por los gastos, hay que gastar menos”.
El presidente del consejo general de Colegios de Economistas de España, Valentí Pich, entra de lleno en el debate. “Cuando tienes una mala imagen, como país, de que hay una alta presión fiscal, sea más o menos real, eso es lo que cuenta, y subir más el IRPF sería una mala política”.
Territorio pequeño
Pich añade que es difícil aplicar una medida así en un territorio pequeño como Catalunya, porque los más acaudalados, aunque ya tienen otras vías para tributar, siempre dentro de la legalidad, podrían tener domicilios fiscales en Madrid o en otras comunidades.
Pich, en cualquier caso, deja claro que no es una propuesta extraordinaria, y que el presidente francés la quiere aplicar en Francia.
Cohesión social
Heribert Padrol, socio de Gómez-Acebo y Pombo, especialista en derecho tributario y fiscal, enlaza con el objetivo del PSC. Según Padrol, el efecto recaudatorio de una subida del IRPF para rentas altas sería casi nulo, pero ofrece una imagen política potente, que es la que necesita el socialismo catalán en esta campaña electoral.
“Es una medida, seguramente, de consumo interno, para reforzar la cohesión social”, añade Padrol.
Esa es la intención del PSC, con Lucena como estandarte de las políticas económicas, pese a que la responsable socialista en esta legislatura ha sido la diputada Rocío Martínez-Sampere. Lucena aseguró que tiene una relación personal muy buena con Martínez y que colaborarán durante la campaña.
En el ámbito industrial, además, el PSC ha planteado la fusión del ICF con Acc1ó como la verdadera creación de una ventanilla única «que cubra el abanico completo de las necesidades empresariales; desde la financiación de circulante, hasta los proyectos de I D y actividad exterior».
Cualquier medida será insuficiente, sin embargo, para que el PSC trate de romper la polarización sobre la independencia.