Moreno desoye a Casado: las elecciones serán “lo más tarde posible” porque queda “mucho por hacer”
El presidente andaluz hace su discurso navideño desde un bar en apoyo al sector, emulando a una Ayuso cuya estrategia le ha dado grandes resultados
En Fin de Año hay tradiciones para todos los gustos, tan diferentes entre sí como las familias unas de otras. Hay hogares en los que cuando tocan las campanadas se formula un deseo y el del presidente andaluz Moreno Bonilla, todavía a horas de que caiga el carrillón y suenen los cuartos, es que la convocatoria electoral sea “lo más tarde posible” porque “cada día es más importante en la recuperación económica y social”.
Así lo ha expresado este 30 de diciembre, durante el tradicional mensaje de Navidad dirigido a los andaluces desde una taberna en Granada, en lo que se entiende como un nuevo gesto de autonomía frente a la dirección nacional del PP que, con distinta intensidad, ha venido presionando al dirigente andaluz a convocar cuanto antes unas elecciones cuyo resultado podría arropar a Casado en su carrera hasta la Moncloa, toda vez que el incontestable triunfo de Ayuso en Madrid sólo ha servido para mostrar que el presidente del PP todavía es un líder en construcción.
A diferencia de lo ocurrido en Castilla y León, donde el presidente castellanoyleonés Fernández Mañueco anunció unas elecciones para el próximo 13 de febrero que pillaron por sorpresa a su hasta ahora vicepresidente Francisco Igea, Moreno ha vuelto a poner de manifiesto el plácido matrimonio político del que goza junto a Juan Marín y Ciudadanos, pese a todas las tormentas que se ciernen alrededor.
A su socio de gobierno, ha agradecido de manera explícita durante su alocución “la lealtad y responsabilidad”, aspectos que han contribuido a “la estabilidad política de la que ha gozado Andalucía en los tres últimos años”. “Andalucía tiene hoy un gobierno estable, y creo que esa calma política ha contribuido en gran medida a alcanzar los éxitos que antes soñábamos”, ha aseverado.
Mensaje desde un bar, guiño a una hostelería sin restricciones
Y si esta enésima escenificación de Moreno por espantar el adelanto electoral es lo más destacado en el contenido, en las formas el escenario es el gran protagonista de este último discurso del año, el tercero como presidente andaluz. Tras elegir el Hospital Militar de Sevilla como escenario en 2020, emblema de los nuevos centros inaugurados por el Ejecutivo PP-Cs, este año San Telmo, sede de la Presidencia, ha decidido situar el mensaje en un clásico de la hostelería granadina, la centenaria taberna Granados, en un claro apoyo del Gobierno andaluz a uno de los sectores más golpeados por la crisis de la Covid-19.
“Lo hago desde aquí porque la hostelería y la restauración ha sido uno de los sectores que con más dureza ha sufrido las consecuencias de la pandemia. Decenas de negocios como éste se han visto abocados al cierre”, ha expresado el líder popular. La elección se entiende también como un guiño a esa libertad sin restricciones frente a la pandemia promulgada a lo largo de los meses por Ayuso, que tan buenos resultados electorales le ha reportado a la presidenta madrileña, aunque en el tono y el estilo ambos difieran sustancialmente.
Con todo, en plena sexta ola de contagios, con los sindicatos sanitarios en pie de guerra por el reciente despido de ocho mil sanitarios, con la Consejería de Salud haciendo un llamamiento para que vuelvan a sus consultas los enfermeros y médicos jubilados ante la falta de personal en los centros y con la comunidad científica abogando por imponer restricciones más severas para frenar el avance de la variante Ómicron, la elección de situar este mensaje en un bar es, cuanto menos, cuestionable, a juzgar por las reacciones suscitadas. Otra cosa, son las razones que cada uno de los partidos arguye en sus críticas.
En concreto, Vox ha censurado “la hipocresía y autobombo” de Moreno Bonilla al grabar su mensaje de Año Nuevo en un bar de Granada ya que sus restricciones han arruinado a miles de hosteleros”. De hecho, a lo largo de este jueves se ha hecho viral en redes el mensaje que Macarena Olona, uno de los nombres que más suenas desde las filas de VOX para encabezar esta lista de las próximas elecciones autonómicas, ha lanzado contra el presidente andaluz tras protagonizar un tenso momento en el que una antivacunas le increpaba a Moreno la imposición del pasaporte Covid como medida para frente a los contagios.
Al respecto, en su discurso Moreno ha recordado que a lo largo de 2021 en Andalucía, donde han fallecido 6.3000 personas por Covid este año, se han inoculado “15 millones y medio de vacunas. El 93% de los andaluces mayores de 12 años tiene puesta al menos dos vacunas, y más de 200.000 niños de entre 5 y 12 años ya tienen al menos una dosis” a la par que ha vuelto a poner de manifiesto que hace unos días solicitó al Gobierno de España acelerar el ritmo de entrega de vacunas pediátricas y de refuerzo.
Por su parte, el líder de los socialistas andaluces, Juan Espadas, ha criticado esta semana que el Gobierno andaluz es “incapaz de ejecutar el propio presupuesto de sanidad, de mantener a 8.000 sanitarios y evitar el colapso sanitario: es incapaz de planificar y asegurar al personal sanitario para que no se vaya de Andalucía, pero ahora pide militares para hacer su trabajo en la vacunación”. En la misma línea, desde CCOO han denunciado que “Juanma Moreno está llevando al límite al sistema sanitario de forma genérica y a la Atención Primaria de forma particular. Y todo ello para acabar el ejercicio con superávit en los presupuestos del 2021, pero a costa de poner en peligro la salud de los ciudadanos y de sus trabajadores”.
Sobre las críticas de la oposición y los sindicatos al deterioro del sistema público de salud, Moreno ha respondido que “en menos de tres años” se han abierto en Andalucía, seis nuevos hospitales y cinco nuevos centros de salud y se han incorporado 12 mil sanitarios de refuerzo.
Asimismo, Moreno ha aprovechado para reclamar a Pedro Sánchez la renovación del Fondo Covid-19 para 2022 y la puesta al día del modelo de financiación autonómica, aspecto éste del que ha sido uno de sus principales valedores protagonizando una inédita alianza junto a varios presidentes autonómicos, entre ellos el socialista valennciano Ximo Puig.
Por último, y haciendo gala del talante moderado que le ha situado ya como un barón de referencia en el mapa nacional, Moreno ha reivindicado el espíritu de la Transición, “tan válido hace cuatro décadas como ahora”, y ha hecho un llamamiento durante su discurso de Navidad a los partidos políticos “sobre la necesidad de diálogo y consenso”.
Para “dejar a un lado los debates que nos dividen, ya sea en Andalucía o en España”, ha expresado a la par que, sobre el modelo territorial, que ha tensionado la convivencia en los últimos años, Moreno ha conminado a la ciudadanía a exigir a los políticos “un mayor esfuerzo para ponernos de acuerdo. Garantizando la igualdad entre españoles. Andalucía, tenedlo por seguro, permanecerá siempre atenta para que ninguna reclamación de nadie derive en privilegios para unos pocos”.
Con un llamamiento a la prudencia pero también con un mensaje optimista para que los andaluces no abandonen la alegría que los identifica, el presidente Moreno ha hecho honor al espacio que acoge este discurso y ha brindado a la salud de todos. Que su brindis lleva implícito el deseo de que el resultado de las próximas elecciones le convierta de nuevo en presidente no es ningún secreto.