Moreno cancela el Día de Andalucía en Madrid en el que iba a participar Díaz Ayuso
El Gobierno andaluz prosigue su estrategia de aislarse de la crisis del PP y retira de la agenda el clásico acto institucional del 28F en la capital que se iba a celebrar el martes en el Palacio de Cibeles y a la que estaba prevista la asistencia de la presidenta madrileña
Juan Manuel Moreno Bonilla, presidente del Gobierno andaluz, ha cancelado de su agenda institucional el acto del día de Andalucía que tradicionalmente se celebra en Madrid en la semana previa al 28F y que este año iba a tener lugar en la tarde del próximo martes 22 con la participación de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso.
Según fuentes consultadas por Economía Digital, el acto, un clásico en la agenda de la Junta, terminó de concretarse en la jornada del miércoles 16 de febrero, se incorporó a la agenda institucional el jueves y ya el viernes, cuando la crisis del PP estaba en pleno fragor tras la entrevista de Pablo Casado en la Cope en la que acusó al hermano de la dirigente madrileña del cobro de comisiones por intermediar en la venta de material sanitario en los primeros meses de la pandemia, se dio orden de retirar este acto del calendario de trabajo del Ejecutivo autonómico.
Fiel a la teoría del “encapsulamiento del Gobierno andaluz” promulgada por Moreno, Marín y Bendodo cada vez que hay un movimiento sísmico en el entorno político –fue la fórmula empleada tras la abortada moción de censura en Murcia y tras el complicado escenario en que queda Mañueco tras las elecciones de Castilla y León, esta cancelación, que no cambio de fecha, es el modo más evidente de explicitar que el Gobierno andaluz evitará cualquier contacto con Madrid y con los dirigentes que están protagonizando esta batalla sin precedentes en la historia del Partido Popular. Así será, al menos, hasta que esta crisis no amaine, circunstancia que se antoja lejana en el horizonte a decir de las movilizaciones contra la dirección nacional del partido que se han celebrado este domingo las puertas de Génova 13.
La secuencia oficial diseñada para este Día de Andalucía en Madrid contemplaba, además de la asistencia de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, la participación de Elías Bendodo, consejero de la Presidencia, y de José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid. La presencia de Juan Marín, vicepresidente de la Junta de Andalucía, estaba pendiente de confirmación.
Tras dos años marcados por la pandemia y con una celebración de perfil bajo del 28F en Madrid, el Día de Andalucía estaba llamado a ser un gran encuentro del Gobierno andaluz con la comunidad andaluza que vive en la capital. Según estaba diseñado, esta ceremonia se iba a celebrar en el auditorio Caja de Música CentroCentro del Palacio de Cibeles, sede de la Alcaldía del Ayuntamiento de Madrid e iba a contar con la activa participación y asistencia de la Federación de las Comunidades Andaluzas Centro de España (Fecace).
Al igual que se hacía en tiempos de los gobiernos socialistas, el objetivo era reforzar la celebración del 28F junto a las asociaciones andaluzas con presencia en la Comunidad Autónoma de Madrid, conocedores que se trata de una federación que mueve cerca de 14.000 personas en la capital. Según ha podido saber este medio, la presencia de Moreno Bonilla en este acto había generado “una gran expectación” entre los miembros de Fecace.
Desde hace varios años, el Día de Andalucía en Madrid ha contado con la actuación del Ballet Flamenco de Andalucía, compañía dependiente de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y embajador del flamenco andaluz en España. En concreto, para esta edición el Ballet ya estaba trabajando en el diseño de un recital de baile que se interpretaría en el marco de una ceremonia en la que también se iban a entregar distinciones a andaluces con especial proyección en la vida pública en Madrid. Según esta misma secuencia, se iban a entregar un total de cuatro premios (Protagonista del Mundo del Espectáculo; del Mundo del Deporte; del Mundo de la Empresa; y del Tercer Sector).
Muro en Despeñaperros y escuetos mensajes de “unidad”
Según fuentes consultadas por este medio, desde el punto de vista institucional, el presidente andaluz evitará en los próximos días cualquier acto fuera de Andalucía y mantendrá una agenda en las distintas provincias centrada en escenificar el dinamismo del Ejecutivo autonómico, sobre todo en el ámbito sanitario, después de las movilizaciones protagonizadas por los partidos de izquierda y los sindicatos este sábado por todo el territorio.
En la agenda política, esta semana se celebrará sesión plenaria en el Parlamento de Andalucía y, como es habitual, el jueves tendrá lugar la sesión de control al Presidente de la Junta de Andalucía por parte de los grupos de la cámara en las que será de esperar que utilicen esta crisis como arma de desgaste de las siglas que en la comunidad representa Moreno Bonilla, reacio a pronunciarse sobre este asunto más allá de un ruego por la “unidad” que formuló el pasado viernes en Cádiz.
Se espera que el cara a cara del presidente con los partidos de la oposición, entre los que también se alinea Vox, sea especialmente duro y se da por hecho que se pedirá la convocatoria urgente de elecciones en Andalucía, aspecto que no entra ahora mismo en la estrategia del Gobierno andaluz, que ya ha anunciado en múltiples ocasiones que está dispuesto a agotar la legislatura al máximo. El 27 de noviembre, el domingo anterior al 2 de diciembre, cuando se cumplen cuatro años desde la elección de los diputados, es la fecha que con más fuerza figura en las quinielas, una fecha que cobra mayor fuerza con un PP en crisis, escenario que recomienda evitar un llamamiento a las urnas ante el más incierto de los resultados.
Elías Bendodo, presidente del PP de Málaga y persona de mayor confianza para Moreno Bonilla, es el único dirigente que en las últimas horas se ha pronunciado al respecto de la crisis del PP. En la noche del sábado lanzó en Twitter un mensaje de “unidad en los momentos difíciles” tras su participación de un acto de partido en la capital malagueña.
Parece evidente que este cauto llamamiento a la unidad sea insuficiente dado el calibre de la batalla fratricida en el seno del PP que aboca, de no encontrar una resolución rápida y solvente, con llevarse por delante los cimientos del principal partido de la oposición.