Montoro presume de los presupuestos más »electoralistas» que se recuerdan
El Gobierno sugiere más rebajas fiscales si el Partido Popular gana las próximas elecciones y más transferencias a las autonomías
El Gobierno ha presentado los presupuestos para 2016, los quintos que prepara en esta legislatura a punto de terminar, y adelantó que las cuentas podrían incluir nuevos recortes tributarios si el Partido Popular (PP) vuelve a ganar las elecciones generales previstas para final de año.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, asegura que por primera vez desde el inicio de la crisis, el Estado registraría el año que viene un superávit primario, lo que podría permitir seguir reduciendo impuestos y cumplir, a la vez, el exigente objetivo de déficit del 2,8% del PIB.
«Credibilidad y confianza»
«A medida que tengamos disponibilidad presupuestaria, seguiremos bajando los impuestos», dijo Montoro en rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, cámara que deberá tramitar de forma extraordinaria en agosto la ley presupuestaria.
Montoro justifica este adelanto en la necesidad de ofrecer «credibilidad y confianza» a las finanzas españolas, y advirtió a un hipotético nuevo gobierno en contra de modificar la política económica del PP, tras asegurar que la austeridad había sacado a España de la crisis.
«La economía española depende totalmente de la confianza exterior», asegura el ministro, que aludió durante su comparecencia a la difícil situación vivida en Grecia después de que Syriza ganara las elecciones a principios de año.
Más ingresos fiscales
Tras desvelar el pasado viernes las grandes líneas de los presupuestos, Montoro y su equipo ministerial presentaron la letra pequeña de las cuentas del Estado del año que viene, que prevén importantes incrementos de los ingresos tributarios y una nueva reducción de los gastos.
Los presupuestos están marcados por el impacto favorable de un crecimiento del PIB un 3%, la mejora de la recaudación tributaria de hasta un 6,2%, y la reducción del gasto en desempleo (-21%) y de la carga financiera de la deuda pública (-5,6%).
Los presupuestos prevén un importante incremento de los recursos transferidos a las comunidades autónomas (CCAA) –que se encargan de sanidad, educación y servicios sociales–, de un 8,75%, hasta 92.795 millones de euros, como consecuencia de la aplicación del sistema de financiación y la liquidación de 2014.
Partidas que crecen
Los gastos en personal crecerán un 4,9%, a 16.839 millones de euros, con un incremento de las nóminas de los empleados públicos de un 1%, después de la rebaja de 2010 y de los años posteriores de congelación salarial.
Las inversiones son la única partida junto a los salarios públicos que crecerán con respecto a este año, y aunque lo harán un 4,6%, hasta 3.578 millones de euros, la cifra apenas supone el 1,9% del total de gastos.
Los pensionistas verán, por su parte, incrementadas sus prestaciones el 0,25% el próximo año, el mínimo previsto por la última reforma del Gobierno, que desvinculó su cuantía de la inflación.
Críticas sin piedad
Los sindicatos han criticado por electoralistas las cuentas del Estado del año que viene, y consideran que el PP ha entrado en campaña con unos presupuestos en un escenario irreal a modo de programa electoral.
CCOO dijo que los presupuestos seguían pensando más «en la magia estadística de la macroeconomía» que en las necesidades reales de las personas, mientras que UGT consideró que eran una oportunidad perdida para propiciar una salida justa y equilibrada de la crisis.
Tras la entrada en el Congreso de los Diputados, los altos cargos de cada ministerio presentarán sus presupuestos entre el 18 y el 20 de agosto, y el debate a la totalidad podría celebrarse entre los días 25 y 26 de agosto.
Aprobación definitiva
Después de ir al Senado y volver al Congreso, su aprobación definitiva se realizará en octubre, cuando el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, debería disolver las Cámaras para convocar elecciones para final de año.