Montero estudia imponer un recargo a las compañías eléctricas y petroleras por la inflación
La ministra de Hacienda abre la puerta a aplicar una "aportación adicional" si estas empresas están obteniendo beneficios "no justificables"
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha explicado que el Gobierno está estudiando imponer un recargo a las compañías eléctricas y petroleras si se demuestra que están teniendo beneficios «no justificables», ante el actual contexto marcado por la inflación.
Montero ha planteado que se deberá valorar si en los presupuestos de 2023 es necesario «poner en marcha algún tipo de aportación adicional por parte de las grandes petroleras o las grandes empresas de electricidad». No obstante, ha puntualizado que este recargo se impondrá si las compañías «efectivamente están teniendo márgenes de beneficio que en este momento puedan ser no justificables».
Continúa la bonificación a los combustibles
Además de la posibilidad de imponer este recargo, que no ha detallado, Montero ha asegurado que el Gobierno mantendrá la bonificación al precio de los carburantes mientras los precios se mantengan elevados.
Pues, la medida, incluida en el real decreto ley contra las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania ha impedido, según Montero, que en este momento haya precios aún «más desorbitados» respecto a la gasolina.
«Todo el mundo asistimos con perplejidad a que, pese a la ayuda, los precios del petróleo sigan subiendo», ha lamentado para luego añadir: «Esto es un elemento que tenemos que ver que en el menor plazo posible se pueda combatir», ha remarcado la ministra.
Además, la titular de Hacienda ha defendido que la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) ha señalado en los diferentes informes sobre esta bonificación que no está apreciando «ningún tipo de situación irregular por parte del mercado» de las gasolinas.
Impuesto «extraordinario» a las eléctricas
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, insistió hace unos días en la necesidad de fijar un «impuesto extraordinario a las eléctricas”. A su juicio, las compañías suministradoras deberían hacerse “corresponsables” de la actual situación de inflación que está comportando unos precios que considera «imposibles para la ciudadanía”.
A pesar de que, en declaraciones a los medios de comunicación, valoró de forma positiva las medidas del real decreto de respuesta económica a la crisis provocada por la guerra de Ucrania, también urgió a ir «un paso más» allá para que repercutan en los colectivos “que más lo necesitan», de la misma manera que «están haciendo otros países».