Mireia Boya deja la cúpula de la CUP por la «agresión» de un compañero
La exdirigente, ahora en el secretariado general de la CUP, denuncia una "agresión psicológica continuada" durante su etapa en el Parlament
Mireia Boya abandona la dirección de la CUP. La exdiputada catalana, imputada por desobediencia en la causa del 1-O, deja la cúpula de la formación anticapitalista tras sufrir «un episodio continuado de agresión psicológica» por parte de un compañero de partido, con el que no quiere trabajar en el secretariado nacional. Se desconoce su identidad.
La líder independentista hizo pública una carta este viernes en la que sostenía que «necesita tiempo para cuidarse y, por primera vez, me lo cojo». La decisión se comunicó de forma interna el pasado 17 de marzo por unos hechos que ocurrieron mientras ella era diputada en el Parlament de Catalunya, entre enero de 2016 y octubre de 2017.
«La situación me generó problemas de salud que escondí debajo de una coraza que me fabriqué a medida», admite. Un vez abandonada la cámara, Boya coincidió con su «agresor» en el secretariado. «Tiene comportamientos agresivos y roles de poder», lamenta en la misiva.
La exdiputada pidió no trabajar con la persona que le incomodaba, pero la CUP no atendió a sus demandas. «Vi con tristeza como en las organizaciones tendemos a dar la vuelta a las prioridades y olvidarlas para hacer periférico lo que realmente importa: las personas», añade.
Boya también reflexiona sobre «el reto colectivo de mejorar la gestión de las agresiones machistas»; un comportamiento, señala, que se produce dentro de los partidos y que sucede también en la CUP. «Cualquier proyecto de país de futuro que no se erija sobre esta base fracasará», dice. Y zanja: «Visibilizar la vulnerabilidad propia es una apuesta para cambiarlo todo desde la sororidad».
Boya será juzgada en el TSJC
Más allá de su dimisión, Boya seguirá en la esfera pública, pues el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya la juzga por desobediencia en la causa del 1-O. La aranesa fue diputada por Lleida y, a pesar de presentarse en las elecciones del 21-D, no repetirá en la cámara al no haber logrado escaño.