Minuto de silencio y ofrenda floral: así ha sido el sobrio homenaje a las víctimas del 17-A
Víctimas, familiares, autoridades políticas y efectivos de emergencia implicados han protagonizado la ofrenda floral a los fallecidos por el atentado
Un acto sin sorpresas, breve y sin parlamentos. El acto de recuerdo a las víctimas de los atentados del 17 de agosto de 2017 se ha desarrollado en el corazón de Las Ramblas, junto al mosaico de Joan Miró donde el terrorista Younes Abouyaaqoub abandonó la furgoneta con la que los terroristas perpetraron el cruel ataque.
Tras un minuto de silencio acompañado de El Cant dels Ocells del violoncelista catalán Pau Casals, las víctimas y familiares de los fallecidos en el ataque terrorista que se saldó la vida de un total de 16 personas han procedido a depositar las flores en las zonas habilitadas.
Despliegue de autoridades
Las autoridades han ido después. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès; la Ministra de Transportes, Raquel Sánchez; la presidenta del Congreso, Meritxell Batet; la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera; y la presidenta del Parlament, Laura Borràs; han ido depositando las flores.
Los cuerpos y fuerzas de seguridad también han aguardado su turno para rendir homenaje a las víctimas del 17-A. En el acto han asistido uniformados responsables de los Mossos d’Esquadra y de la Guardia Urbana, así como de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
También, han participado en el acto destacados líderes políticos de la oposición autonómica y municipal. En el acto estaban presentes el líder del PSC, Salvador Illa, así como la diputada del PP en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat; o el portavoz del PP en el consistorio, Josep Bou.
Barcelona recuerda con un acto de pequeño formato el cuarto aniversario del 17-A, que es el primero que tenga lugar con una condena –todavía no-firme– a los investigados por los atentados. La Audiencia Nacional impuso penas de 8 a 53 años de cárcel a los únicos supervivientes de la célula terrorista y el paseo marítimo de Cambrils (Tarragona).
Las penas de prisión a los implicados: 53, 46 y 8 años
El terrorista Mohamed Houli, que fue herido en la explosión de Alcanar, fue condenado a 53 años de cárcel. Driss Oukabir, quien alquiló la furgoneta con la que se atentó en la Rambla fue condenado a 46 años de cárcel, mientras que Said Ben Iazza, responsable de haber dejado su documentación y una furgoneta frigorífica para comprar explosivos, tan solo 8 años.
El imán de Ripoll, cerebro de los atentados de Barcelona, murió en la explosión de la casa de Alcanar donde se guardaban los explosivos con los que tenían planeado atacar la Sagrada Familia. El resto de miembros de la célula, incluido Younes Abouyaaqoub, murieron abatidos por los Mossos d’Esquadra.
La sentencia no es firme, y será la Audiencia Nacional quien deba resolver los recursos pendientes. Ninguno de ellos, en tanto que no participaron directamente en los atentados, ha sido juzgado por terrorismo, algo que alega la Asociación de Víctimas del Terrorismo para que la sentencia sea anulada.