Miles de turistas alemanes toman Mallorca en Semana Santa (a pesar de las advertencias)
Aena gestionará un total de 532 vuelos que conectan Alemania y Mallorca entre el 26 de marzo y el 5 de abril con miles de turistas a bordo
España mantiene desde el viernes restringida la movilidad entre comunidades autónomas para evitar que los contagios de coronavirus se incrementen durante la Semana Santa. Sin embargo, las fronteras del país permanecen abiertas para la llegada de turistas procedentes del extranjero. Esta contradictoria medida ha provocado que mientras la población nacional se prepara para celebrar en sus hogares las fiestas, miles de alemanes hayan reservado ya un billete de avión para pasar el puente en Baleares.
Aena ha calculado que gestionará un total de 532 vuelos que conectan Alemania y Mallorca entre el 26 de marzo y el 5 de abril, las fechas marcadas en rojo en el calendario por los días festivos. Como resultado, miles de ciudadanos teutones pasarán sus vacaciones en alguna de las islas del archipiélago, a pesar de las advertencias que ha hecho el Gobierno de Angela Merkel para que no se desplacen durante los días clave. Sin restricciones concretas sobre la mesa, han hecho oídos sordos.
Para poner ejemplos concretos sobre este incremento de los pasajes, la agencia Eurowings, que ofrece vuelos «low cost» a diferentes puntos del viejo continente, ha volado este fin de semana un total de 44 veces desde los aeropuertos alemanes hasta Mallorca. Es cuatro veces más que el registro de vuelos que se produjo hace siete días, cuando apenas se contabilizaron 12 operaciones, según ha publicado Europa Press.
Es un caso similar al que ha protagonizado la aerolínea alemana TUI que ha vendido un paquete turístico para esta Semana Santa a casi 2.000 visitantes que llegarán a las islas españolas en 15 aviones diferentes.
El Gobierno defiende que está cumpliendo las condiciones de la Comisión Europea
Esta paradójica situación, ha forzado a varios miembros del Gobierno a justificar su postura. Todos han hecho llamamientos en lo que va de semana para concienciar a la ciudadanía europea de que no es el mejor momento para visitar España, pero no han decidido decretar un cierre temporal de las fronteras para garantizar que no entre ningún turista.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, también ha defendido esta postura del Ejecutivo de Pedro Sánchez. Argumenta que se está cumpliendo con las recomendaciones de la Comisión Europea, que apuesta por mantener abierto el espacio Schengen de libre circulación, siempre que sea posible. “Quienes vienen de fuera tienen las mismas limitaciones que los españoles una vez que llegan a nuestro país”, ha expuesto en una entrevista en Televisión Española.
Actualmente la incidencia acumulada de Baleares se encuentra en mínimos de apenas 28 casos positivos por cada 100.000 habitantes, tras haber superado la tercera oleada de coronavirus. Sin embargo, en Alemania el mismo indicador ha marcado este domingo los 129, según los datos del Instituto Robert Koch. Son cinco veces más.
Alemania también hace llamamientos pero permite las salidas de turistas
La situación es idéntica a la que sacude al Gobierno de Angela Merkel, cuestionado por el avance de la cuarta oleada de contagios que ya ha alcanzado Alemania. Las autoridades sanitarias decidieron sacar a Baleares, la Comunidad Valenciana, Castilla La Mancha, Extremadura y Murcia de su lista roja de territorios con restricciones, después de que mejorase notablemente su situación epidemiológica.
A pesar de eliminar las prohibiciones internacionales de viaje, desde la propia Embajada alemana se han enviado mensajes continuos a sus ciudadanos desaconsejando los viajes turísticos durante la próxima Semana Santa, incluso en las zonas que no están clasificadas como de alto riesgo.
Sus llamamientos no parecen haber hecho mella en los turistas alemanes que sí que han optado por uno de sus destinos tradicionales en verano, poniendo fin a meses de ausencias. Por el lado bueno, es el primer indicio de recuperación del sector turístico que esta Semana Santa se prepara para su segundo batacazo consecutivo.
Alemania, el segundo país emisor de visitantes a España, apenas envío 2,4 millones de ciudadanos en un 2020 marcado por la pandemia. Fue un desplome del 78,4%, que todavía se ha acrecentado más en el primer tramo del año.