Mas duda entre Rull y Turull para dirigir Convergència
Los dos dirigentes son los mejor colocados para la secretaría general ante el descarte de los consellers
El President Artur Mas es un dirigente al que no le gustan mucho los cambios. Y que valora la lealtad y la dedicación.
Ahora, pese a su poca predisposición en los últimos meses, es consciente de que debe afrontar la sustitución de Oriol Pujol en la secretaría general de Convergència, y quiere que ese relevo sea rápido, sin esperar a los días previos al 6 de septiembre, que es cuando se ha convocado un consejo nacional extraordinario del partido para elegir a la nueva dirección.
Pese a las expectativas iniciales, en función de los perfiles de los candidatos que podrían optar, Mas se inclina por dos nombres, dejando claro que el nuevo secretario general no tendrá una connotación en clave sucesoria, si no que deberá aguantar el partido en los próximos meses, de cara, principalmente, a las elecciones municipales de mayo de 2015.
Y los dos dirigentes con más opciones son Jordi Turull, portavoz de CiU en el Parlament, y Josep Rull, secretario de organización y que compartía, junto con Lluís Corominas, las responsabilidades que había dejado Oriol Pujol.
La determinación de Rull
Mas, de hecho, se inclina por Turull, un hombre disciplinado. En su favor, porque a Mas le gusta una cierta acumulación de responsabilidades, está su labor al frente del grupo parlamentario de CiU. Oriol Pujol ejerció, de hecho, de secretario general y de portavoz en el Parlament al mismo tiempo.
Pero Mas valora el esfuerzo de Rull y su disponibilidad. Rull quiere ser secretario general. También Corominas, pero es Rull quien realmente entiende que le ha llegado su tiempo.
Ningún conseller
En cualquier caso, Mas ha descartado que pueda ser algún miembro del Govern. Aunque, de hecho, el único conseller que podría ser secretario general, con un conocimiento amplio del partido, y que “sufre” por su situación, es Felip Puig. Mas no desea acometer cambios en el Govern, y, tanto Puig, como Francesc Homs, o, incluso Santi Vila –no muy interesado en ello– se han autodescartado.
Aunque se había hecho broma en determinados círculos políticos por la sonoridad de los apellidos, el hecho es que Convergència está ahora en manos de Rull y Turull, o no necesariamente en ese orden, si no más bien en manos de Turull y Rull.