Mas-Colell da por hecho que tendrá un déficit cercano al 1,5% en 2013
El conseller de Economia asegura que el presupuesto será un "drama"
El President Artur Mas reunió a todo el Govern el pasado sábado en el Palau de Pedralbes, donde estaba prevista la cumbre social con la oposición. La reunión no se convocó, finalmente, pero Mas la aprovechó para pedir a todos sus consellers que intensifiquen la relación con los miembros del Ejecutivo español.
De hecho, quien lo lleva haciendo desde hace meses es el conseller de Economia, Andreu Mas-Colell, consciente de la situación insostenible de las finanzas catalanas. Y Mas-Colell da por hecho, tras las negociaciones que lleva protagonizando con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que el déficit fijado en los presupuestos de 2013 será algo más flexible, del 0,7% exigido a un porcentaje cercano al 1,5%. Esas son las previsiones con las que trabaja el conseller, según fuentes del Govern.
Respiro vital
Ese respiro es vital para que la Generalitat pueda aprobar las cuentas de 2013. Primero, porque el socio principal de CiU, Esquerra Republicana, no acepta ese corsé del 0,7%, que implicaría un ajuste de unos 4.000 millones de euros, un esfuerzo en un año que es similar al afectuado en los dos años anteriores. Pero también porque el propio Mas no desea poner en peligro los servicios esenciales del estado del bienestar.
Mas-Colell, en una entrevista en Rac1, ha asegurado este lunes que da por descartado que el déficit deba ser del 0,7%. “No iremos con el objetivo del 0,7%. Esto está bien orientado, Europa flexibilizará el objetivo español, no tardará mucho, y esta vez la negociación llevará a compartir ese margen extra, no sé en que proporción, pero la negociación está bien enfocada”, ha asegurado.
El Gobierno central castiga a «todas» las comunidades
La situación, por tanto, podría enderezarse. Mas-Colell ha rechazado que el Gobierno central castigue de forma especial a Catalunya por la decisión del President Artur Mas de convocar una consulta de carácter soberanista. Lo que sí está ocurriendo, a juicio del conseller, es que el el Gobierno central quiere salir de la crisis “con una administración pública adelgazada, y eso implica unas comunidades autónomas adelgazadas”.
Para Mas-Colell existe un proceso de “recentralización, que implica un trato despreciativo, discriminatorio y una política de ahogo, pero lo hace todas las comunidades”.
En cualquier caso, con un margen mayor de déficit para 2013, el presupuesto será “un drama”. El conseller admite que la prórroga de los presupuestos puede ser válida durante unos meses, pero que no es sostenible durante todo el año.
En el Govern, y en CiU, sin embargo, comienza a valorarse de forma muy clara un acercamiento a otros socios parlamentarios, en concreto al PSC.
Las dificultades para entenderse con Esquerra son evidentes, y, aunque se mantiene la voluntad de celebrar la consulta soberanista –Mas-Colell ha afirmado que no renunciarán a ello, aunque el Gobierno central lo pudiera sugerir– comienza a pesar la necesidad de buscar un aliado más sólido.
El problema es que los socialistas ven ese escenario todavía lejano. Los próximos meses podrían ser, no obstante, decisivos para acercar posiciones.