Los mejores trucos para evitar que te pierdan la maleta en el aeropuerto
Aterrizar y comprobar que el equipaje se extravió puede arruinar las vacaciones, a menos que se sigan estos consejos
¿A quién no le ha pasado alguna vez de quedarse solo en la cinta de recogida de equipajes del aeropuerto, esperando en vano la maleta que nunca llega?
Entre la decepción y los nervios, al concurrir al mostrador de atención al cliente le avisan que la maleta se ha extraviado, que no fue embarcada o quién sabe qué excusa.
Y aquí se inicia una carrera contra la logística, al empezar un viaje o estar de regreso sin más ropa que con la que se ha viajado.
Para evitar estas situaciones tan angustiantes, sobre todo en época de vacaciones, repasamos algunos consejos para evitar que la maleta quede extraviada y nos fastidie el viaje.
Hacer el check-in temprano
Una de las causas más habituales que el equipaje quede en tierra es que no hay espacio suficiente en el avión.
Si el vuelo va lleno y todos los pasajeros viajan con muchos bultos -como suele suceder en los vuelos transoceánicos-, es posible que las maletas despachadas a último momento queden en el aeropuerto y sean enviadas en el primer vuelo al mismo destino.
Si se quiere evitar esta situación, lo mejor es hacer el check-in temprano y despachar el equipaje con tiempo.
Asegurar la maleta
Si se entrega una maleta pesada y los cierres o trabas no están bien sujetos, en caso de caída puede dañarse y su contenido quedar desparramado por el suelo.
Y el avión no espera: en estos casos el personal apartará la maleta y la enviará en otro vuelo.
Hay que evitar las escalas con un margen de tiempo muy reducido: no es la primera vez que el equipaje sea despachado en otro vuelo porque no se llegó a tiempo a embarcarlo
Atención a los tiempos de las escalas
Si se tiene una escala con un margen de tiempo muy breve es posible que la maleta no pueda ser cargada a tiempo en el segundo avión.
Para evitar problemas, lo mejor es dar un margen de al menos dos horas entre vuelo y vuelo; sobre todo en los grandes aeropuertos como los de Madrid, París, Fráncfort o Londres.
Quitar las etiquetas viejas
Cada equipaje despachado tiene una pegatina con un código de barras que permite a los empleados del aeropuerto saber a qué avión se destina.
Pero si se dejan las etiquetas antiguas puede prestar a confusión y que la maleta termine en cualquier otro destino.
Etiquetar el equipaje
Conviene dejar no una sino dos etiquetas para identificar la maleta. En ellas hay que incluir los datos personales, teléfono y mail de contacto.
Una de ellas tiene que estar en alguna de las asas de sujeción, y otra en el interior; porque no es la primera vez que por el roce la etiqueta se desprenda y pierda.
También sirve su algún despistado se lleva nuestra maleta y necesita ubicarnos cuanto antes para devolverla (y quizás recuperar la suya).
Contratar un seguro
Varios seguros de viaje ofrecen un adicional en caso de pérdida de maleta. Aunque no servirá para recuperarla inmediatamente, sí es útil para obtener una compensación en caso de necesitar ropa, elementos de higiene o lo que sea para continuar el viaje.
Igualmente, en caso de extravío uno tiene derecho a reclamar una indemnización a la aerolínea, que puede llegar hasta los 1.587 euros.
Mejor una maleta grande antes que dos pequeñas
Si no se excede el máximo de peso en los vuelos transoceánicos, que es de 23 kilos, es mejor usar una maleta grande en vez de distribuir el equipaje en dos maletas pequeñas: las posibilidades que se pierda se reducen a la mitad.
Ser discreto y desconfiado
Aunque los aeropuertos extreman su vigilancia, en ocasiones sale la noticia que uno o varios trabajadores se dedican a robar equipajes.
Es mejor ser discreto y evitar las maletas ostentosas. Además, hay que asegurarla con candado y, en lo posible, film protector.
Y por supuesto, jamás despachar en bodega maletas con artículos electrónicos, joyas o dinero: es una tentadora invitación al robo.
Usar un localizador
Por ahora este es el método más efectivo. El localizador más popular es el Air Tag de Apple, lanzado en abril de 2021, y es un pequeño dispositivo con forma de gota que permite identificar la localización del equipaje desde el móvil u ordenador.
Pero hay que hacer una advertencia: el Air Tag funciona mejor cuando el objeto, en este caso el equipaje, está detenido. Si está de un lado al otro en las cintas transportadoras lo más probable es que el sistema no lo detecte.
Pero en todo caso es muy útil para saber si la maleta llegó al aeropuerto, o si directamente nunca fue embarcada.
Claro, para ser detectada, tiene que estar relativamente cerca del dispositivo Apple. Si fue a parar a otra ciudad, no hay forma de saberlo.