Madrid recurre a médicos jubilados para acelerar la campaña de vacunación
La Consejería de Sanidad contratará a profesionales retirados que no hayan cumplido los 70 años para reforzar su estrategia de inmunización
La Comunidad de Madrid ha decidido echar mano de profesionales sanitarios que ya se han jubilado para aumentar la plantilla que se encarga de la campaña de vacunación contra el coronavirus. Solicitarán la incorporación de médicos y enfermeros que ya no estén en activo pero que no superen los 70 años de edad.
La Consejería de Sanidad ha ofrecido tanto a los centros de atención primaria, como a los hospitales y a los departamentos de emergencias la posibilidad de reincorporar a los profesionales jubilados para meter una marcha más en los planes de inmunización.
El trabajo será remunerado, se cotizará a la Seguridad Social y se podrá compatibilizar con el cobro de la pensión por jubilación que ya perciben los médicos y enfermeros retirados. Una estrategia bien fijada para tratar de elevar los porcentajes de protección contra la Covid-19.
La decisión responde a las propias peticiones que han hecho los profesionales sanitarios que ya no están en activo pero que han visto desde sus casas las dificultades que ha arrastrado la región para cumplir con el ritmo de vacunación en los primeros compases de la campaña, que arrancó ya el pasado 27 de diciembre.
Madrid impulsa su estrategia: sanidad privada y estadios deportivos
La Comunidad de Madrid ya acordó la semana pasada la autorización para que los hospitales de la sanidad privada puedan participar también en la estrategia de vacunación, poniendo a disposición sus centros sanitarios y a los profesionales, mientras se prolongue la situación de emergencia.
Desde que se inició la campaña, los responsables autonómicos ya ha formado a más de 2.500 profesionales sanitarios para administrar la vacuna contra la Covid-19, mientras que otros 2.000 están completando los procesos para aprender a inocular las dosis.
El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso aspira a lograr una vacunación mucho más rápida de lo que ha conseguido en los últimos dos meses. Por eso, también ha comunicado que habilitará nuevos espacios para administrar las inyecciones a la población en grandes recintos públicos como el WiZink Center o el estadio Wanda Metropolitano, sede del Atlético de Madrid.
España se prepara para la llegada de más vacunas
Este cambio en la forma de administración de las vacunas responde a un inmuniente aumento de la llegada de dosis que se producirá en el próximo trimestre, gracias a las partidas de las farmacéuticas Pfizer, Moderna y Astrazeneca.
La previsible autorización de un nuevo fármaco en las primera semanas de marzo, como el que ha diseñado la compañía estadounidense Johnson & Johnson, abre la puerta a un flujo todavía mayor de vacunas. Hasta ahora, no se han cumplido las previsiones que se establecieron a finales del 2020 por los problemas de producción y el incumplimiento de los contratos de algunas farmacéuticas.
La llegada de nuevas vacunas permitirá comenzar a administrar el preparado entre otros grupos de la población. La Comisión de Salud Pública ya ha acordado que se seguirá priorizando en función de la edad de los ciudadanos, lo que abre la puerta a una campaña dirigida a un público mucho más masivo. Hasta ahora, solo se han inyectado vacunas a los mayores de las residencias y al personal sociosanitario.
España ha administrado más de 2,9 millones de vacunas de las 3,6 millones de dosis que ha recibido por parte de las compañías farmacéuticas. Un total de 1,1 millones de españoles ha recibido ya las dos inyecciones que le proporcionarán una protección completa contra la Covid-19. Apenas representa un 2,3% de la población del país.