Madrid protagonizó el mayor incremento de mortalidad durante la pandemia
La Comunidad de Madrid registró un 41% más de fallecidos en el año de la pandemia de coronavirus, muy por delante del resto de autonomías
La Comunidad de Madrid es la autonomía que ha experimentado un mayor repunte de la mortalidad durante el año de la pandemia de coronavirus. La región cerró el 2020 con un aumento de los fallecidos del 41,1% con respecto a un año convencional, lo que la sitúa en cabeza en la clasificación española.
Los datos forman parte del informe anual que la Asociación Nacional de Servicios Funerarios (Panasef) presenta cada año con motivo del día de Todos los Santos, pero que en esta ocasión tienen una lectura más importante. El aumento de los decesos son uno de las variables que se han utilizado desde el inicio de la crisis sanitaria para fiscalizar los datos públicos sobre muertos del coronavirus.
El informe de la patronal funeraria coloca a Madrid por delante del resto de autonomías. En el último año fallecieron en la región 66.583 personas por diferentes motivos, lo que representa un notable incremento con respecto a las 47.165 del 2019, antes de que comenzara a detectarse la Covid-19 en España.
La autonomía se quedó así muy por encima de la media nacional. La radiografía funeraria muestra que en 2020 se contabilizaron un total de 492.930 defunciones en el país por todas las enfermedades. Es un 17,7% más que en el año anterior, casi 25 puntos por debajo del récord protagonizado por Madrid.
El informe de la patronal explica que la media de defunciones llegó a subir en puntos como la ciudad de Madrid hasta un 500% durante las fases más duras de la pandemia.
En términos relativos, la siguiente región más sacudida por el incremento de la mortalidad es Castilla-La Mancha que cerró el año con un repunte de los fallecidos del 32,3%. Le siguen de cerca Castilla y León (26%), Cataluña (23,4%) o Navarra (19,6%).
El año de la pandemia se ha saldado con una media de 1.350 fallecimientos al día y algunos cambios en el comportamiento social. Ha aumentado hasta el 86,4% el volumen de familias que optan por ceremonias religiosas para despedir a sus seres queridos, frente al 13,6% que prefiere un acto civil.