Madrid pide limitar reuniones y estar en casa en zonas con contagios
La comunidad recomienda extremar la prudencia en los encuentros sociales, después de que la Justicia haya tumbado el cierre de los locales de ocio nocturno
Madrid ha dejado la puerta abierta a nuevas restricciones sobre nuevas medidas relativa a las «actividades sociales» pese a la «dificultad jurídica» a la que se han encontrado. El viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19, Antonio Zapatero, ha calificado de «mala noticia» que el juez haya tumbado las restricciones de los horarios en bares y restaurantes, así como la prohibición de fumar en la calle.
Zapatero ha lamentado que el juzgado venga a «poner en duda» las restricciones suspendidas: «Tenemos en la cabeza medidas para tomar, pero ahora mismo tenemos esta dificultad jurídica». El viceconsejero del gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha asegurado que estudiarán la manera de «establecer más medidas y que tuviesen respaldo legal».
El responsable de la Sanidad madrileña ha apuntado ciertas «recomendaciones» tras el revés judicial, como evitar «viajes innecesarios» o «intentar quedarse en casa en las zonas en las que hay más incidencia de casos», aunque ha afirmado que la situación actual «no amerita confinamientos por zonas». Usera o Villaverde son algunas de las zonas en las que se están registrando más casos en la capitali madrileña.
«Por ahí puede ir alguna medida, siempre y cuando seamos conscientes de que tenemos espacio legal para poder tomar medidas«, ha lamentado. Zapatero ha señalado que se deben evitar las reuniones innecesarias, siendo absolutamente recomendable «no más de diez personas».
El juez permite fumar en la calle
El auto que tumba las medidas contra la Covid-19, que ha dictado el magistrado Alfonso Villagómez Cebrián, ha anulado la norma de la Comunidad de Madrid que impedía fumar en la calle si no se respetaban los dos metros y medios de seguridad para evitar contagios por coronavirus.
La magistrada ha explicado que uan autonomía no puede «limitar derechos fundamentales con carácter general sin una previa declaración de la alarma». Villagómez considera que un estado de alarma «habilitaría para hacer un uso intensivo de medidas jurídicas de limitación de los derechos fundamentales y libertades públicas».
El auto certifica que a partir de una cierta «intensidad en la afectación de los derechos fundamentales», que no se aprecia en la orden dictada por la Consejería de Sanidad madrileña, «si dicha limitación afecta a la generalidad del territorio de la comunidad autónoma, la única opción es una declaración de estado de alarma singularizada a su territorio».
El texto ha recordado que «el Gobierno puede delegar en la autoridad de la presidenta de las Comunidad de Madrid la ejecución de las medidas restrictivas de derechos«. ¿Cómo? Ayuso puede alertar de la situación al Ejecutivo español y solicitar al Gobierno esta declaración de alarma».
