Los empresarios catalanes se movilizan y reclaman un nuevo acuerdo por El Prat
Las principales patronales quedan "en shock" tras el anuncio del Gobierno de que suspende la inversión para ampliar el aeropuerto
La negativa a ampliar el aeropuerto de Barcelona-El Prat supuso un jarro de agua fría para el empresariado catalán. Tras movilizarse de manera masiva antes del verano para la obra, el sector se agarraba a una inversión de 1.700 millones de euros para satisfacer al fin una de sus demandas históricas. «Es una cuestión generacional», decían. Con el no de las administraciones, patronales y organizaciones reaccionaron con tal de intentar rescatar un proyecto calificado por todos como estratégico.
«Esto es muy fuerte» era lo único que adivinaban a decir desde una de las patronales catalanas después de escuchar a la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, que oficializó la marcha atrás del Gobierno por la falta de confianza en la Generalitat. Hasta bien entrada la noche –la rueda de prensa fue antes de las 19h– no hubo los primeros posicionamientos, señal que cojo a los empresarios con el pie cambiado.
Foment del Treball declinó pronunciarse públicamente. La patronal de la gran empresa convocó a los medios de comunicación este jueves por la mañana a una rueda de prensa con su presidente, Josep Sánchez Llibre, en la que se augura que la organización empresarial fijará una postura muy dura contra el Govern. Las llamadas en el seno de la organización fueron constantes durante toda la noche, precisamente por el trato fluido que su cabeza visible tiene con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
De hecho, la institución abanderó el acto celebrado el pasado mes de junio en la escuela de negocios Esade que aglutinó a un centenar de empresarios, aunque en esta ocasión no se espera que el dirigente aparezca escoltado por los grandes nombres de la economía catalana.
Sí se pronunció Pimec, la patronal de la pequeña y la mediana empresa. El presidente de la institución, Antonio Cañete, exigió responsabilidad tanto al Gobierno como a la Generalitat para «alcanzar un nuevo acuerdo que apruebe la ampliación». «No podemos aceptar que se retire esta inversión; no podemos renunciar al progreso que nos aportan las infraestructuras públicas y privadas que son vitales para el país», añadió.
El dirigente trató de mostrarse optimista y todavía augura esperanzas para que las desavenencias entre ambas administraciones se reconduzcan. «Hemos vivido situaciones más complejas que se han podido resolver por la vía del consenso y el diálogo».
Aena aprobará el DORA este mismo mes de septiembre ya sin la ampliación de El Prat
En la misma línea se expresó el presidente del Cercle d’Economia, Javier Faus. En declaraciones a Efe, el exvicepresidente del FC Barcelona insistió en el «sentido de la responsabilidad». «Pedimos a las dos administraciones que vuelvan a la mesa de diálogo y continúen trabajando para hacer posible la ampliación, como se pactó el 2 de agosto», señaló.
No obstante, Aena –el gestor aeroportuario– prevé aprobar el Documento de Regulación Aeroportuaria 2022-26 (DORA) –el marco que regula todas sus inversiones– en Consejo de Ministros este mismo mes de septiembre. Con tan poco margen, el mundo empresarial es pesimista cuando se le pregunta sobre un posible cambio de opinión de Sánchez.
Aunque el Gobierno siempre habló de suspender y no de cancelar la inversión, la ministra Raquel Sánchez lamentó que el plan para diseñar la inversión «ha perdido ahora toda la necesidad». Un atisbo para la esperanza entre los empresarios: la dirigente remarcó «la voluntad de mano tendida» y no retiró del proyecto las obras en las instalaciones de Girona y Reus.
Poca confianza en el Govern
En su comparecencia, la ministra criticó con dureza los vaivenes de la Generalitat acerca de una obra que, teóricamente, había quedado pactada el pasado 2 de agosto. «El Govern no tiene una posición madura. En los últimos días, ha cambiado su posición. Incluso algunos miembros puede que asistan a la manifestación del 19 de septiembre», criticó.
“Es imposible llevar a término un proyecto de esta envergadura sin el apoyo de la Generalitat. Para hacerlos se necesitan grandes consensos”, añadió.
El empresariado catalán ya se manifestó para pedir un Govern centrado en la recuperación económica
Sus palabras se unen a la desazón de un empresariado que ya recibió con sospechas el Ejecutivo catalán salido de las urnas e investido en mayo. Patronales y organizaciones incluso salieron a la calle en marzo para pedir que se formase con presteza un nuevo Ejecutivo centrado en la recuperación económica tras la crisis del coronavirus. Tuvieron que esperar más de dos meses hasta tener un nuevo interlocutor político.
La batalla por el espacio natural protegido de La Ricarda –que desaparecería de ampliarse el aeropuerto– fue la gota que colmó el vaso de una relación que ya venía deteriorada en los últimos años. No hay que obviar que a la escenificación del apoyo a la ampliación acudieron varios de los primeras espadas del ecosistema empresarial barcelonés.