Los empresarios catalanes esperan »resignados» nuevas elecciones
Luis Conde reúne en Girona al presidente Puigdemont y a miembros del Govern con ministros del PP y les pide ''moderación'' para afrontar los retos políticos y económicos
«La resignación es la tónica, nadie considera que sea posible evitar unas nuevas elecciones, no hay posibilidad». Esa ha sido la idea que empresarios y políticos han repetido en un almuerzo en la localidad de Fonteta, en Girona, organizado por el empresario Luis Conde en su masía. El encuentro se había convertido en tradicional, pero el último se convocó en 2014, y con el objetivo, como ahora, de recoger fondos para la fundación El trampolín, dedicada a la atención a personas discapacitadas.
Conde ha reunido a cuatro ministros del PP; Ana Pastor, Jorge Fernández Díaz, Rafael Catalá y José Manuel García-Margallo, junto al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, el vicepresidente Oriol Junqueras y los consellers Jordi Jané, Santi Vila y Jordi Baiget. Junto a ellos, hasta 315 personas, representativas del mundo económico y político catalán.
Moderación y cuidado con el crecimiento
Aunque algunos responsables políticos intentan en los últimos días diversos acercamientos, para lograr la investidura de un presidente, se ha llegado a la conclusión que «lo mejor», en estos momentos, es que se acabe el plazo legal, el 2 de mayo, y se convoquen elecciones de forma automática para el 26 de junio.
Un empresario consultado que asistió al amuerzo asegura que los dirigentes políticos «no están a la altura», y que en la reunión no se ha podido vislumbrar ningún proyecto «sólido o con ambición», ni por parte del gobierno catalán, ni por parte de los ministros del PP.
Economía robusta
Fuentes empresariales sí destacan la actividad de Junqueras, que ha estado «muy participativo», junto a Elvira Rodríguez, presidenta de la CNMV, también presente en el almuerzo. Lo único positivo, a pesar de algunas sombras, que los empresarios destacaron en el almuerzo es que la economía española «sigue sólida, y robusta, pese a esta indefinición politica».
Uno de los asistentes ha sido Francesc Homs, el portavoz de Convergència en el Congreso, que ha buscado que el PSOE encuentre alguna salida, junto a Ciudadanos y Podemos. Prueba de ello han sido las entrevistas de Pablo Iglesias y Albert Rivera con Carles Puigdemont en las últimas dos semanas.
Investir a Sánchez
El gobierno catalán está interesado en que Pedro Sánchez pueda ser investido, pero apenas queda tiempo para lograr un acuerdo, que sólo podría pasar ahora por una abstención de Podemos.
El soberanismo catalán, por tanto, a pesar de que mantiene «oficialmente» su hoja de ruta en Cataluña, busca una salida en Madrid, y trabaja para un acuerdo que deje al PP en la oposición. Artur Mas, presente en el almuerzo en la Masía de Conde, aseguró en su despedida como presidente, un día antes de la investidura de Puigdemont, y en un consejo nacional de Convergència, que haría todo lo posible para que el PP no gobernara en la próxima legislatura.
En el almuerzo algunos asistentes han percibido a Mas más moderado de lo habitual, y es que en las últimas semanas ha manifestado su deseo de rebajar la tensión y de moderar el proyecto soberanista para buscar un acuerdo con el nuevo gobierno español que se constituya en Madrid.
Nutrida representación
Respecto al ámbito económico, han participado, entre otros, los presidentes de la patronal Foment del Treball y de la Cámara de Comercio de Barcelona, Joaquim Gay de Montellà, y Miquel Valls; Enrique Lacalle, presidente del Salón del Automóvil; el empresario hotelero Joan Gaspart; Alfredo Sáenz, ex Consejero Delegado del Santander; Josep Oliu, presidente del Banco Sabadell; el promotor Josep Maria Xercavins; Marc Puig, consejero delegado del grupo Puig; el presidente y consejero delegado de Ercros Antoni Zabalza; el presidente de Telefónica en Cataluña Kim Faura y Josep Crehueres, presidente de Planeta.