Los dirigentes de Podemos que aplaudían a Iglesias celebran ahora su marcha
La coordinadora de Podemos en Canarias, Laura Fuentes, considera que la marcha de Iglesias ofrece a Podemos la posibilidad de hacerse oír más y abandonar los debates personalistas.
A Rey muerto, Rey puesto. Es la frase que están aplicando las numerosas federaciones de Podemos tras la marcha de Pablo Iglesias. Su sucesora en el Gobierno, Ione Belarra, es la favorita para suceder al ex vicepresidente al frente del partido y los dirigentes que antes tanto aplaudían a Iglesias ahora ven «positiva» su salida.
La coordinadora de Podemos en Canarias, Laura Fuentes, es la primera en dar la cara ante los medios, pero existen más personas dentro del partido que forman parte de la lista de Belarra, es decir, del sector ‘oficialista’, que ahora piensan lo beneficiosa que ha sido su salida.
Fuentes no se esconde y considera que la marcha de Iglesias ofrece a Podemos la posibilidad de hacerse oír más y abandonar los debates personalistas. «Hay mucha gente que ama a Pablo Iglesias y otra gente que lo odia. Y ahora hay un grupo de personas menos controvertidas que hará que la gente nos escuche, nos valore y no generamos tanta animadversión», afirma en un medio canario.
Otros prefieren no dar la cara, pero sí cuentan a los medios que la libertad que proclama Isabel Díaz Ayuso en Madrid se puede notar en algunas federaciones de Podemos, sobre todo, las que se han enfrentado directamente o han sido más críticas con Iglesias.
Este fenómeno también ha llevado a los más fieles a hacer todo lo contrario: querer abandonar el partido, incluso, la política. Es la sorpresa que Pablo Echenique dio a sus compañeros este viernes.
En una entrevista en Aragón Radio, el portavoz de Podemos en el Congreso aseguró que «no tardaré mucho en volver a mi profesión». Echenique todavía no ha decidido si figurará en las listas de las próximas elecciones en 2023. «Es sano en política no estar mucho tiempo», zanjó.
Fuentes de Podemos confirman a ED que «no sabíamos nada» y «esto nos ha dejado muy sorprendidos». Echenique no sería el único ni el último, advierten. Otros como el ex secretario de Organización, Alberto Rodríguez, ya anunció que no formaría parte de ninguna candidatura dispuesta a liderar el partido tras el adiós de Iglesias: «Creo que toca cerrar una etapa».
Un nuevo reto para los territorios
La rapidez es la esencia de la guerra, según Sun Tzu, y los territorios de Unidas Podemos han comenzado a rearmarse y a exigir más autonomía a la dirección nacional tras la salida de Iglesias. Las federaciones quieren tener voz. Así y según ha podido saber Economía Digital, varios territorios, entre los que se encuentra Canarias, se han reunido en estas últimas semanas con Belarra para exigirle «más autonomía» a la hora de tomar decisiones.
«Es lógico cuando nosotros sabemos mejor lo que sucede en nuestros propios territorios», señalan y añaden «no queremos decisiones impuestas de Madrid». Reformular el nuevo Podemos tras la salida de Pablo Iglesias supone también un reto para todos los territorios. «Hasta ahora hemos estado muy condicionados por el peso del líder y de Madrid», señalan desde Castilla-La Mancha.
La mayoría de federaciones moradas han tenido sus más y sus menos con la dirección nacional por reivindicar su autonomía, tanto en el ámbito orgánico como en el de la acción política. De ahí que ahora se encuentren negociando con Belarra un nuevo «sistema de relaciones», según explican, entre la dirección regional y la estatal.
Federaciones como la andaluza piden, además, refuerzos ante lo que puede ser la próxima gran batalla: sobrevivir a Más País. Y es que el partido de Iñigo Errejón se convierte en la próxima gran amenaza a batir en algunos territorios. Podemos Andalucía critica, incluso, que hayan intentando ‘robarles’ a dirigentes entre sus filas.
Lo mismo sucede en Valencia. Pero a este bastión sí que está atendido por Belarra. La reciente ‘purga’ con Iglesias todavía de vicepresidente desplazó como portavoz en las Cortes valencianas a Naiara Davó para hacer un partido a la medida del sector más oficialista, ahora de la corriente de Belarra. De hecho, varios nombres de la federación están incluidos en su lista para ser miembros del Consejo Ciudadano Estatal.
El dar más autonomía o no a las federaciones territoriales será la próxima batalla interna que le espera a Unidas Podemos, una vez que este domingo se celebre el Vistalegre IV. Todo apunta a que Belarra será la sucesora de Iglesias y tendrá que decidir los derroteros del partido.
Varias dudas flotan en el ambiente: ¿Seguirá siendo ministra? o, tal y como comentan dentro del partido, podría dejar su puesto en el Gobierno para dedicarse en cuerpo y alma al partido. ¿Concederá más autonomía a los territorios o Madrid seguirá llevando la voz cantante? ¿Formalizarán una confederación con el resto de fuerzas de izquierdas para presentarse en las elecciones?
De todo ello depende el futuro de Podemos y su posible hundimiento hacia la insignificancia más absoluta. De todas formas, la alargada sombra de Pablo Iglesias «siempre está». Las fuentes consultadas insisten en que, aunque haya salido de las redes sociales, Iglesias sigue preocupándose por la deriva del partido y los asuntos importantes.