Los diputados catalanes reclaman la consulta como un acto “democrático”
Turull, Rovira y Herrera inciden en que el Gobierno debe “canalizar las demandas soberanistas”
Los diputados catalanes que han defendido el derecho a decidir en el Congreso han incidido en que la petición, que tiene una fuerza social detrás, se debe canalizar porque se trata de una demanda democrática. Con diferentes acentos, con la voluntad de relacionar el referéndum para poder crear un estado con un mayor bienestar social para los catalanes, Jordi Turull (CiU), Marta Rovira (ERC), y Joan Herrera (ICV) han recordado que, seguramente, sin la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut, en 2010, la situación sería ahora muy distinta.
Pero aquel error, se considere ahora o no, es pasado. Turull ha afirmado que las fuerzas políticas catalanas, por lo menos las que defienden el derecho a decidir, quieren un acuerdo con el Gobierno, y estarían dispuestas a modificar la pregunta de la consulta. Estarían dispuestos a un acuerdo, para “mejorarla, si es debido, entre todos”.
Sensación de fatiga
Los tres diputados, que podían escuchar el asentimiento de una nutrida representación del Parlament en los palcos del Congreso, han insistido en que Catalunya ha buscado acuerdos en los últimos años, y la sensación, ahora, “es de fatiga, porque se ha intentado todo”, según Turull, y con palabras muy similares según Marta Rovira.
Joan Herrera, sin embargo, ha querido ir algo más allá, al situar el debate soberanista en un debate más general sobre la erosión que están sufriendo las instituciones españolas. La idea de Herrera es que “el pacto constitucional” ya no sirve, y que se debe encontrar una vía de reforma, que podría ser, en su caso, un estado federal. Y ha dejado una frase para defender su propio proyecto político: “Los que defienden la soberanía española son los mismos que la ofrecen a los mercados”.
Los tres han insistido en la fuerza de las movilizaciones sociales, dejando claro que no es un capricho de nadie.
Mayor bienestar con un estado propio
Rovira, algo más nerviosa que sus compañeros del Parlament, ha querido pronunciar un discurso más cercano, con la idea de que muchos catalanes no quieren seguir como hasta ahora, y que piensan que con un estado propio, las nuevas generaciones de catalanes tendrán más oportunidades y más bienestar. “Nuestros hijos podrán vivir mejor”, ha afirmado.
Es la posición de esas tres fuerzas políticas, que son conscientes de que el PP y el PSOE rechazarán el derecho a decidir. Sin embargo, esperan que Rajoy abra alguna ventana, pese a rechazar la consulta.