Los datos de Astrazeneca en España: 20 casos de trombosis entre 5 millones de vacunados y 4 muertos

Los casos de trombosis como efecto secundario de la vacuna de Astrazeneca han marcado la campaña de vacunación. Llegó a paralizarse por completo, después se limitó -tras muchos giros- a personas de entre 60 y 69 años, y ahora todos los menores de esta edad que recibieron la primera dosis deben decidir si quieren la segunda. Todo este enredo por 20 casos de coágulos de sangre y cuatro muertos entre casi cinco millones de vacunados con este fármaco.

Estos son los cálculos que han confirmado fuentes del Ministerio de Sanidad a distintos medios de comunicación y que concluyen que se produce un deceso por trombosis por cada millón de vacunados. En cuanto a casos, por cada 100.000 dosis administradas se notifican 0,5%, siempre con la primera dosis y, en su mayoría, en menores de 60 años. Y es que el riesgo de que se produzcan estos efectos adversos aumenta según baja la edad: se han producido 14 casos por millón de personas de 30 a 39 años, 12 entre los de 40-49 años y a solo 2 en el de mayores de 60.

Es por ello que, aunque el riesgo sea mínimo –la Agencia Europea del Medicamento (EMA) argumentó que este efecto era «muy raro»– el departamento que dirige Carolina Darias ha optado por ofrecer la vacuna de Pfizer a las personas jóvenes que ya recibieron la primera dosis del laboratorio británico. De esta forma, reducen los riesgos y aprovechan las vacunas disponibles de la farmacéutica estadounidenses.

Sanidad reconoce un problema de comunicación en torno a Astrazeneca

El Departamento de Sanidad ha reconocido que se ha producido un «gravísimo problema» a la hora de comunicar qué iba a ocurrir con las personas menores de 60 que recibieron el primer pinchazo de Astrazeneca y estaban a la espera de ver qué pasaba con el segundo. Según han informado a La Vanguardia fuentes del ministerio, no se trata de elegir entre un fármaco u otro: la opción que propone es inocular con Pfizer.

Es decir, con los datos del informe elaborado por el Instituto Carlos III, que concluye que es eficaz la mezcla de vacunas, la apuesta de Darias es únicamente por Pfizer. No obstante, la Comisión de Salud Pública de la semana pasada abrió la opción a que aquellos que la rechazaran tuvieran la opción de administrarse la de Astrazeneca bajo la firma de un consentimiento. De hecho, desde el departamento han lamentado las críticas que ha recibido esta investigación realizada con más de 600 voluntarios.

Pero también han reconocido algunos errores, como que falta comparar los resultados con una pauta completa de Astrazeneca. Tras los ensayos clínicos de las farmacéuticas el prospecto era claro: dos dosis de la misma vacuna con un intervalo de tiempo determinado. Sin embargo, esta investigación española ha suscitado interés en la EMA, e incluso este jueves fue presentado en Canadá.