Los botellones se multiplican en Barcelona: 16.200 personas desalojadas el fin de semana
Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana desalojan una macrofiesta en la playa de Sant Miquel que albergaba a más de 2.000 jóvenes

Varios jĂłvenes recogen sus pertenencias en la playa de la Barceloneta mientras la policĂa los desaloja despuĂ©s de que varios miles de personas se habĂan congregado. EFE/Marta PĂ©rez
El primer fin de semana completo sin el estado de alarma se ha saldado con dos noches consecutivas de fiestas multitudinarias en las calles de Barcelona, donde la liberaciĂłn del toque de queda ha multiplicado los botellones. Los agentes de policĂa han desalojado en la Ăşltima madrugada a más de 9.000 personas que participaban en concentraciones multitudinarias, sin respetar las normas de seguridad sanitaria.
El operativo especial de los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana se ha desplegado por segunda noche seguida en la capital catalana para hacer frente las fiestas en playas, plazas y calles de la ciudad. Entre las 22.00 horas del sábado y las 6.00 horas del domingo, los agentes han dispersado a 9.055 jóvenes que estaban incumpliendo con las normativas. El parte total del fin de semana se eleva hasta más de 16.235 personas que han participado en estas macrocelebraciones.
La playa de Sant Miquel ha sido el epicentro de las fiestas multitudinarias de la madrugada del sábado. Más de 2.000 personas se habĂan concentrado en esta popular zona para beber, bailar y cantar, aprovechando el final de las restricciones de movilidad nocturna en Cataluña. La aglomeraciĂłn ha forzado la actuaciĂłn policial para dispersar a los jĂłvenes hacia el Paseo Juan de BorbĂłn, con el objetivo de minimizar el impacto sobre las casas de los vecinos de la zona.
El Paseo de Born y el de LluĂs Companys han vuelto a ser tambiĂ©n escenario de estos botellones que incumplen la normativa sanitaria por el elevado nĂşmero de personas que participan. Ambos lugares ya fueron lugar de celebraciĂłn el pasado 9 de mayo. El plan de restricciones de la Generalitat solo contempla reuniones de hasta seis personas, siempre que no sean convivientes. Mientras que la falta de distancia social y el uso de la mascarilla brillan por su ausencia.
El recuento se ha incrementado despuĂ©s de los primeros sĂntomas de liberaciĂłn de los jĂłvenes que se produjeron en el pasado domingo, justo cuando decayĂł el estado de alarma y Cataluña pudo ampliar su duro mapa de restricciones que hasta entonces contempla la restricciĂłn de movilidad desde las 22.00 horas.
La Guardia Urbana ha afirmado que de momento no se han detectado momentos de riesgo durante el desalojo de los jĂłvenes, aunque ha hecho un llamamiento para que se sigan cumpliendo las medidas mĂnimas de prevenciĂłn sanitaria. Aunque el toque de queda ya no se mantenga, la prohibiciĂłn de los botellones es un fenĂłmeno comĂşn en la mayor parte de las comunidades autĂłnomas.
Atascos y playas concurridas en el primer fin de semana sin estado de alarma
El final del estado de alarma no solo ha desencadenado los botellones nocturnos, también ha sido una oportunidad para que miles de personas hayan realizado por primera vez en más de seis meses viajes con destino a otras comunidades autónomas. El resultado ha sido las primeras imágenes de atascos a las salidas de grandes ciudades como Madrid.
El destino de buena parte de los turistas nacionales en este primer fin de semana libre de restricciones de movilidad ha sido la playa. La Comunidad Valenciana y Murcia llegaron a elevar la llegada de personas hasta un 53% con respecto a la semana anterior, cuando todavĂa imperaba el cierre perimetral.
Prácticamente todas las grandes arterias que parten desde la capital española han protagonizado concentraciones de tráfico a lo largo del fin de semana. Es el caso de las autovĂas de Burgos (A-1), Valencia (A-3) y Extremadura (A-5). Mientras para la noche del domingo ya se espera la operaciĂłn retorno.