Los autónomos más perjudicados por la reforma de Escrivá
La segunda fase de la reforma de las pensiones introduce distintas medidas dirigidas a incrementar los ingresos para garantizar la sostenibilidad del sistema
La segunda fase de la reforma de las pensiones impulsada por el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, prosperó con el apoyo de los sindicatos CCOO y UGT, si bien no contó con el respaldo de la patronal CEOE. En el marco de la nueva normativa, se aprobaron distintas iniciativas que impactan de lleno en las personas que tienen pensado solicitar la jubilación en los próximos años.
Se trata de medidas que van dirigidas a incrementar el gasto en pensiones, pero también los ingresos para poder garantizar la sostenibilidad del sistema público de estas prestaciones. Por ejemplo, una de las iniciativas dirigidas a incrementar los ingresos es el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que se alargará hasta 2050.
Su entrada en vigor ha comportado una cotización adicional a la Seguridad Social por contingencias comunes, del 0,6%. De este porcentaje, en el caso de los asalariados, el 0,5% corre a cargo de la empresa y un 0,1% del trabajador. Sin embargo, los autónomos han de abonar la totalidad de este porcentaje.
De esta manera, el Gobierno se propone incrementar los ingresos del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, con aportaciones entre 2023 y 2032, para afrontar el gasto en pensiones producido por la jubilación de la generación del baby boom.
Estos son los autónomos más perjudicados por la reforma
Uno de los principales colectivos perjudicados por la reforma de las pensiones es el de los trabajadores por cuenta propia. Y es que, tal y como recoge una opinión sobre la reforma publicada por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), tanto los autónomos, así como las personas con rentas medias o bajas se llevan la peor parte.
Concretamente, asumen el peso de más del 60% de la subida de las cotizaciones y de las medidas dirigidas a incrementar los ingresos para garantizar la sostenibilidad del sistema público.
Según se desprende del documento, en torno a 13 millones de autónomos con rentas inferiores a los 20.000 euros se verán obligados a asumir gran parte del esfuerzo. Sin embargo, los trabajadores por cuenta propia que se verán más afectados serán los que ingresan más de 54.000 euros anuales.
Precisamente, ellos serán los que asumirán un 65% del coste a causa del aumento de las bases de cotización, en contraposición a los que perciban menos de 54.000 euros al año, que únicamente soportarán el 35% porque solo se verán afectados por la subida de cotizaciones sociales del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI).