Represalia en Lledoners por denunciar trato de favor a los presos
La Generalitat expedienta al responsable de seguridad de Lledoners tras negarse a conceder una protección especial a Jordi Cuixart
De izquierda a derecha, Joaquim Forn, Jordi Cuixart, Jordi Sànchez y Raül Romeva durante el juicio del procés. /EFE
La Generalitat ha abierto un expediente al responsable de seguridad de la cárcel de Lledoners (Barcelona) que denuncia un trato de favor hacia los políticos independentistas presos. Este expediente puede acarrearle un traslado de centro.
Según informa El Mundo, el responsable de seguridad se negó a conceder una protección especial a Jordi Cuixart, uno de los presos preventivos que están a la espera de la sentencia del juicio del procés.
La subdirectora de tratamiento de Lledoners, Gema López, pidió al responsable de seguridad que enviara a un funcionario a vigilar de cerca a un preso peligroso destinado al taller de cerámica, donde también se encontraba Cuixart. Según el rotativo, se negó a cumplir con la orden por considerar que se trataba de un trato de favor.
En una carta enviada a la directora de Lledoners, el responsable de seguridad pode su amparo ante los intentos de echarle del centro por sus repetidas denuncias de los tratos de favor hacia los políticos independentistas presos.
En una resolución de la Secretaria de Medidas Penales, se indica que la subdirectora pidió al responsable de seguridad que una de las cámaras de vigilancia hiciera un seguimiento del preso peligroso, a lo que el responsable de seguridad se negó.
En un informe, el responsable de seguridad señala que, antes de proponer la opción de la cámara de vigilancia, la subdirectora le reclamó que enviara a otro funcionario a vigilar al preso peligroso que estaba en el mismo taller que Cuixart.
Cumpleaños con pasteles
Se trata del mismo responsable de seguridad que en 2018 denunció que a los presos independentistas se les permitió celebrar la fiesta de cumpleaños de Jordi Sànchez dentro de la cárcel, con pasteles incluidos.
El sindicato UGT pidió recientemente la destitución de la subdirectora de tratamiento por los supuestos privilegios de los que gozó el presentador de televisión Risto Mejide para entrevistar a Raül Romeva, otro de los reclusos independentistas.
En aquella ocasión, el jefe de comunicaciones de Lledoners denunció que Mejide supuestamente se saltó el protocolo de seguridad. Pese a que había unas 35 personas esperando el turno para hablar con reclusos, Mejide pasó sin respetar el turno. Le acompañaban la esposa de Romeva, la eurodiputada Diana Riba, y un miembro del equipo de producción del programa Todo es mentira (Cuatro). E un comunicado, Mejide lo negó.
