Las llamadas spam se burlan de la ley: estos son sus trucos para seguir molestando
A pesar de la prohibición legal, las empresas encuentran formas astutas de evadir las regulaciones y continuar acosando a los usuarios con llamadas no solicitadas
La lucha contra las llamadas comerciales no deseadas, conocidas como ‘spam’, parecía haber alcanzado un hito con la entrada en vigor de una ley que prohibía estas prácticas invasivas. Sin embargo, a tan solo un mes y medio de su implementación, las empresas han demostrado una sorprendente capacidad para sortear las regulaciones y seguir hostigando a los consumidores con sus persistentes llamadas.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha señalado que, pese a la prohibición, el acoso telefónico continúa en gran medida, y la efectividad de la normativa en la práctica es cuestionable en estos momentos.
Las empresas líderes en el sector de las telecomunicaciones, como Telefónica y Vodafone, han rechazado las acusaciones de no cumplir con la ley. Afirman que operan dentro de los límites establecidos y que no realizan llamadas sin el expreso consentimiento de los usuarios. No obstante, la OCU mantiene su posición, sosteniendo que muchas empresas están explotando lagunas en la ley para justificar sus invasivas llamadas.
La Ley General de Telecomunicaciones, que entró en vigor el pasado 30 de junio, concedió a los usuarios el derecho a no recibir llamadas comerciales no deseadas. Sin embargo, la persistencia de estas llamadas intrusivas sugiere que algunas empresas han desplegado ingeniosas artimañas para eludir la prohibición.
La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) aún no ha proporcionado estadísticas detalladas sobre quejas relacionadas con el incumplimiento de la normativa, pero ha remitido a la información previamente publicada antes de la entrada en vigor de la ley.
Aunque la OCU no ha emitido un informe exhaustivo sobre las quejas de los usuarios debido a la corta duración de la implementación de la ley, ha dado a conocer que las denuncias sobre el incumplimiento de la normativa están en aumento.
Las estrategias empleadas por las empresas para persistir en sus llamadas ‘spam’ parecen ser diversas y astutas. Algunas empresas están interpretando las excepciones de la ley de manera amplia, utilizando argumentos poco convencionales para justificar sus acciones. La ley permite llamadas no deseadas en circunstancias excepcionales, como la protección de intereses vitales o la realización de misiones de interés público. No obstante, la OCU advierte que algunas compañías están abusando de estas excepciones para evadir la prohibición y continuar su acoso.