Ligera relajación en las restricciones: Cataluña reabre los centros comerciales de lunes a viernes
Tras dos meses cerrados, Cataluña permite a partir de este lunes la reapertura de los centros comerciales, pero solo entre semana
Las medidas contra el coronavirus en Cataluña apenas van a experimentar cambios. En los últimos diez días el virus se ha vuelto a expandir por la región, lo que ha echado atrás los planes del Govern de relajar las restricciones. La hostelería mantendrá las mismas limitaciones que hasta ahora con sus franjas horarias y continuará el confinamiento comarcal. En cambio, el comercio será ligeramente favorecido.
Según han informado este viernes en rueda de prensa los consellers de Salut e Interior, Alba Vergés y Miquel Sàmper, el secretario de Salut Pública, Josep Maria Argimon y el comisario de los Mossos, Joan Carles Molinero, la región permite reabrir los centros comerciales a partir del próximo lunes después de casi dos meses cerrados.
No obstante, solo estará permitido hacerlo de lunes a viernes. El fin de semana permanecerán cerrados para evitar aglomeraciones, a excepción de los establecimientos esenciales, como ha ocurrido hasta ahora. Además, Vergés ha explicado que tan solo se podrá ir a comprar, descartando así la opción de ir a pasar el día.
Los comercios de más de 400 metros cuadrados también aliviarán sus medidas: podrán abrir al público con un aforo máximo del 30%. Por otro lado, las piscinas tendrán permitido estar al 50% y los gimnasios podrán llevar a cabo actividades grupales con un máximo del 30% de deportistas.
Según ha indicado el secretario Argimon, «es probable» que el número de contagios suba tras la reapertura de estos centros y de ahí que las nuevas medidas tengan una duración prevista de solo siete días en lugar de los habituales 14 para ir corrigiendo estas decisiones si así es necesario.
El Govern suaviza las medidas en el ámbito educativo pese a los brotes
También se aliviarán las medidas en el ámbito educativo. A partir de este lunes los centros escolares podrán hacer excursiones que permitan pasar la noche fuera y, a partir del siguiente, estarán permitidas las clases presenciales para los estudiantes universitarios de segundo curso o superiores.
Sin embargo, este anuncio se produce tan solo una semana después de que se produjera un brote en la Universidat Autònoma al permitir la asistencia a alumnos de primero. Aun así, Vergès ha insistido en la importancia de que se retomen las clases.
En este sentido, la consellera ha explicado que es consciente de que cuanta más actividad y más movilidad más sube el número de contagios. Así, ha apuntado que la intención de la Generalitat es ir relajando las restricciones de forma paulatina para que la normalidad pueda consolidarse poco a poco, sin dar pasos atrás.
Pero para ello ha instado a evitar los encuentros que requieran prescindir de las mascarillas, como los que implican comer y beber, y ha pedido que se respeten las burbujas de convivencia.
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